En el estado de Sinaloa, un peluche de oso de felpa se convirtió en un inusual escondite para narcóticos, ya que fue encontrado con frascos de codeína en su interior. El destino final de este peculiar paquete era Tijuana, Baja California.
El descubrimiento tuvo lugar durante una operación de revisión llevada a cabo por la Guardia Nacional en una empresa de mensajería y paquetería en el municipio de Culiacán. Los agentes, asistidos por perros entrenados, seleccionaron aleatoriamente varios paquetes destinados a diferentes lugares y sometieron estos envíos al agudo olfato de los canes.
En medio de esta inspección rutinaria, una caja de cartón etiquetada para ser enviada a Tijuana, atrajo la atención de manera especial. Al abrir el paquete, se descubrió un adorable oso de peluche de color beige que, de manera insospechada, albergaba frascos de una sustancia morada conocida como “lean”, la cual contiene codeína como su componente principal, derivada del opio.
El peluche y su peligrosa carga de narcóticos fueron inmediatamente confiscados y trasladados a la Agencia del Ministerio Público Federal en la región, donde se iniciaron las investigaciones correspondientes para identificar a los responsables de este intento de contrabando de sustancias ilegales.
La codeína es un narcótico derivado de la resina extraída de la planta Papaver, comúnmente conocida como opio. Su consumo recreativo y su mezcla con otras sustancias, como refrescos y caramelos, ha dado origen a la popular “Purple Drank”, una bebida casera que puede generar una sensación de relajación, pero que en cantidades excesivas puede provocar euforia y riesgos para la salud.
