En Camino Verde, un estallido de violencia sacudió la comunidad cuando múltiples disparos de armas de fuego resonaron en la intersección de las calles Baja California y Sierra Nacozari. En respuesta a esta emergencia, las autoridades locales se movilizaron rápidamente.
Al llegar al lugar, las autoridades encontraron a un joven de 15 años, Uriel Giovani Soria Higuera, tendido en posición decúbito ventral, rodeado de manchas de sangre. La escena estaba marcada por varios casquillos de bala de calibres .40 y 9mm, sugiriendo una intensa balacera. La investigación inicial sugiere que los disparos comenzaron en una cancha de fútbol cercana.
La unidad de Cruz Roja llegó al lugar para brindar atención médica de emergencia, pero declaró a Uriel sin vida. El joven presentaba un total de cinco heridas por proyectil de arma de fuego: dos en el tórax, una en el hombro derecho, una en el pómulo derecho y otra en el cuello.
La madre del joven, conmocionada por el hecho, relató que se encontraba en su hogar cuando escuchó los disparos y salió corriendo, solo para encontrar a su hijo tirado en el suelo. Proporcionó información crucial sobre la identidad de Uriel, nacido el 20 de diciembre de 2007 en Michoacán.
Además, testigos en la escena informaron que un vehículo sedán de color gris, con quemacocos, salió a toda velocidad del lugar tras los disparos, aumentando las sospechas sobre la posible implicación de un tercer partido en el tiroteo.
En medio de este violento incidente, un vehículo Nissan Quest de color rojo con placas de circulación 4LQP995 fue encontrado con un impacto de bala en la puerta del conductor, sugiriendo que podría haber estado involucrado en la refriega.
