Si usted quisiera ver todas las mañaneras de Facebook realizadas por el gobernador Jaime Bonilla Valdez durante su primer año de gestión, tendría que pasar un mes y cinco días continuos frente a la computadora.
Tal cual: en sus primeros 12 meses de trabajo, Bonilla Valdez pasó el equivalente a un mes y cinco días parado frente a la cámara grabando mañaneras, lo cual se traduce en un desperdicio de tiempo para un gobierno que sólo estará al frente de Baja California durante dos años.
Un ejercicio de monitoreo, revisión y análisis realizado por Glocal Media, revela que en sus primeros 12 meses de mandato, Jaime Bonilla pasó 840 horas grabando mañaneras. 35 días. Más de un mes.
Tal vez aquella tarde del primero de noviembre de 2019 en el teatro del Centro Cultural Tijuana (Cecut), no se vislumbró lo que se venía en torno a las formas y tiempos de comunicar de Bonilla.
“Dejemos la gráfica ahí”, ordenó desde el micrófono casi al inicio de la ceremonia donde le tomó protesta a los miembros de su gabinete. Lucía seguro, de traje negro y corbata dorada; era noche de gala y había que verse bien.
“No tenemos tiempo nosotros, no sabemos cuánto tiempo vamos a gobernar para perderlo en infiernitos…”, expresó frente a la clase política y empresarial de Baja California, que se había dado cita en el recinto acostumbrado a albergar espectáculos.
Pero ese mensaje que apuntaba a un trabajo incesante, sin espacio para tanto discurso, en la práctica no se dio por completo, ya que hasta la fecha las mañaneras son una constante, muchas veces tediosa y repetitiva.
Las últimas transmisiones por Facebook, para el gobernador han sido el mejor escenario para marcar agenda, desacreditar empresas y contrincantes políticos, y por supuesto, exaltar su gestión, todo ello bajo la premisa de mantener a la población informada.
“Ya me quitaron la gráfica otra vez, pongan la gráfica, la del endeudamiento, no quiero que se vayan sin esa memoria”, dijo Bonilla entre risas, aquel uno de noviembre.
En cualquier empleo resultaría complicado o casi imposible, dedicar más de un mes de los doce que tiene el año para algo que no es trabajar, pero no para el encargado de dirigir a Baja California, quien prefiere invertir tiempo y recursos del estado para confrontarse por Facebook mientras informa.
El Gobernador de Baja California en cuestión de discurso, no pierde el tiempo, ¿o sí?
