El Gobierno de la República contestó mediante una carta a los vecinos afectados por el derrumbe de Lomas de Rubí, sucedido en febrero de 2018, que es el Gobierno Estatal y el Ayuntamiento de Tijuana los que deben actuar en consecuencia para resolver la situación.
Después de que vecinos solicitaran al presidente Andrés Manuel López Obrador que intercediera en la resolución del conflicto, la Secretaría de Desarrollo Territorial a nivel Federal respondió mediante oficio que el caso no es de su competencia.
El pasado 26 de noviembre de 2020, el grupo de vecinos entregó una carta al presidente en la que le solicitaron “fincar responsabilidad, suspensión como clausura y embargo total” a la edificadora Grupo Melo y al fraccionamiento Valle del Pedregal, ya que hace más de un año un juez resolvió un amparo a su favor para que las obras fueran suspendidas.
Atalia Ramos, integrante del comité de vecinos afectados, denunció que pese al amparo que prohíbe que se sigan construyendo casas, las obras en dicho fraccionamiento continúan y no han tenido respuesta local sobre esa situación.
Resaltó que con la legislación vigente y como lo señala la respuesta recibida, los gobiernos estatal y municipal debieron vigilar, dar seguimiento y parar esas obras, cosa que no han hecho.
“El municipio tiene conocimiento de ello, el área que le corresponde llevar a cabo estas inspecciones no las está llevando a cabo, la responsabilidad recae en ellos y no lo están haciendo”, dijo.
Ramos lamentó que no se vea el actuar de las autoridades municipales y del estado en ese sentido, por lo que ya piensan en ejercer actividades para que se ejecute esa resolución que está dictaminada por un juez en un Tribunal.
