Taiwán fue sacudido ayer miércoles 3 de abril por el terremoto más devastador de los últimos 25 años. Con una magnitud de 7,2 y su epicentro en el mar cerca de la región oriental de Hualien, el desastre ha cobrado la vida de al menos nueve personas y ha dejado casi mil heridos.
El sismo, que causó daños en decenas de edificios y desencadenó alertas de tsunami en países vecinos como Japón y Filipinas, también fue testigo de momentos de pánico y solidaridad captados en vídeo. Entre ellos, destacan unas imágenes de enfermeras arriesgando sus vidas para proteger a los recién nacidos en un hospital.
La rápida actuación del personal médico quedó plasmada en las cámaras de seguridad de una unidad neonatal en un hospital taiwanés. Las enfermeras, al sentir los temblores, no dudaron en asegurar las cunas de los neonatos, mostrando una preocupación evidente por la seguridad de los pequeños ante posibles escombros o cristales rotos provenientes de las ventanas.
El vídeo se ha viralizado rápidamente en redes sociales, acumulando cientos de miles de reproducciones y generando todo tipo de comentarios, la mayoría elogiando el valiente gesto de las enfermeras durante el terremoto.
