El 8 de marzo de 2022 se cumplió un año de que el empresario fronterizo Rubén Sánchez disparó contra su esposa Ana y su hija Amy de 18 años recién celebrados, matándolas al instante en su casa de Arizona.
Rubén había sido dueño e inversor de negocios nocturnos y del giro negro en Tijuana entre 2013 y 2017. Era socio mayoritario de varias empresas binacionales y de algunas otras al norte de Estados Unidos que incluso cotizaban en Wall Street.
Tal vez por eso, luego de perpetrar el ataque contra su familia, decidió quitarse la vida de un disparo en la cabeza.
Aquel lunes 8 de marzo de 2021, mientras el mundo conmemoraba el Día Internacional de la Mujer, Ana y varios amigos habían ido a cenar para celebrar el cumpleaños número 18 de Amy. Pero sin Rubén.
Según la investigación policíaca, ellas volvieron alrededor de las 10:00 de la noche, cuando el hombre las recibió enrabiado, ebrio y malhablado.
Ana y Rubén se habían separado voluntariamente en los meses más álgidos de la pandemia, pero compartían a la familia.
De manera que luego del encuentro de celebración entre Ana, Amy y sus amigos, ellas tuvieron que volver a la casa que él rentó en una zona residencial de Meza, Arizona.
La joven de 18 años jamás consideró que podría encontrar la muerte en las manos del hombre que le había dado la vida.
Ana, por su parte, conocía bien los límites de su ex esposo al convivir más de 25 años juntos, pero seguramente nunca imaginó que el alcohol, los celos y un arma de fuego pudieran envenenar el corazón de Rubén para cometer semejante salvajada.
En el ataque resultó herida la otra hija menor de ellos, Andrea, una adolescente de 12 años que vió cómo su padre asesinó a su madre, disparó contra su hermana y luego trató de matarla mientras escapaba del hogar.
Fue precisamente la niña herida quien corrió a una casa del vecindario desde donde llamaron al 911.
Dice la investigación que al llegar bañada en sangre a la casa de los vecinos, todos escucharon claramente aquel último disparo suicida mientras esperaban la llegada de los agentes.
Esta historia viene a colación porque -quizás-, para proteger a un empresario como Rubén Sánchez, la policía catalogó el caso como un homicidio-suicidio. Es decir, según el oficialismo gringo, aquel Día de la Mujer de 2021 Ana y Rubén entrecruzaron sus brazos portando un arma cada uno, y dispararon al mismo tiempo como en los ritos míticos de cualquier secta de iluminados.
Pero también tiene relevancia porque en el espacio de los giros nocturnos tijuanenses -en donde Rubén estuvo muy metido-, se sigue reflejando el machismo y la autoridad sobre el cuerpo de una mujer que él ejerció contra Ana y sus dos hijas.
Green Witch
También en marzo pero de este año, un sujeto creyó que era más fácil agredir a dos mujeres en un bar de la Plaza del Zapato que convencerlas de bailar con él.
Esto sucedió en el Bar Green Witch el domingo pasado, tal como lo muestra este video que publicamos ayer jueves.
Aunque está la prueba y la denuncia, hasta el momento el sujeto no ha sido identificado ni detenido, incluso cuando varios medios de comunicación hemos ejercido presión sobre el caso.
En el mismo bar, pero 25 días antes, otra joven denunció haber sido drogada, y cuando reaccionó estaba en un carro teniendo sexo con un mesero del lugar.
Otro caso del que también han abundado datos durante este mes de marzo, sucede en el Bar Hong Kong, en donde las redes exponen una cantidad indescriptible de homicidios y desapariciones de mujeres.
Las cosa es tan grave, que muchos medios que hemos tenido acceso a la información optamos por la autocensura para no exponernos.
Y es que los hombres como Rubén, las víctimas de muerte como Ana y Amy, y las heridas como Andrea, ocurren casi en la misma proporción dentro de las gráficas de la realidad.
Con motivo de marzo de 2022, la gobernadora Marina del Pilar lanzó el proyecto Escuadrón Violeta, mismo que atendió más de 100 casos de violencia de género en sus primeras diez días de funcionamiento.
38 atenciones por violencia intrafamiliar, 16 seguimientos, 24 acercamientos preventivos y 34 traslados: 3 detenidos canalizados a la Fiscalía General del Estado (FGE) y 5 detenidos por faltas. Dos menores fueron llevados al Sistema Integral de la Familia, se reportaron 8 omisiones de cuidado y 5 maltratos. Y todo esto en 10 días.
Hoy viernes que la Fiscalía del Estado difundió un comunicado para presumir su buena estrategia en materia de seguridad, indicaron una reducción del 20% en feminicidios en los primeros tres meses de este año, en comparación con el mismo período de 2021.
Sin embargo, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública señala que Baja California, Veracruz, Chihuahua y el Estado de México son las cuatro entidades que concentran dicho delito al inicio de este año.
Según las cifras suceden menos en Baja California, pero mientras sigan ocurriendo, son la misma vergüenza 2 casos que 60.
Mientras haya meseros que drogan, desconocidos que hieren o Rubenes que matan, Les Ides de Marza seguirán retumbando en Tijuana y Baja California.