WASHINGTON, 14 nov (Reuters) – Miles de partidarios del presidente Donald Trump marcharon el sábado por el centro de Washington para respaldar sus afirmaciones infundadas sobre fraude electoral, mientras el mandatario insiste con impugnaciones legales para anular la victoria del presidente electo Joe Biden.
Una semana después de que el demócrata ganara las elecciones, las demandas de Trump han avanzado poco en los tribunales, mientras que Biden ha recibido llamadas de felicitación de los líderes mundiales y está trabajando en la formación de su gabinete.
Por primera vez el viernes, Trump comenzó a sonar dubitativo sobre sus perspectivas y dijo a los periodistas que “el tiempo dirá” quién ocupa la Casa Blanca desde el día de la toma de posesión el 20 de enero.
Sin embargo, partidarios de Trump con banderas salieron el sábado para quejarse de un presunto fraude electoral. Gritando “¡Detén el robo!” y “¡Somos los campeones!” marcharon desde Freedom Plaza cerca de la Casa Blanca hasta el edificio de la Corte Suprema de Estados Unidos en Capitol Hill.
Decenas de miembros del grupo de extrema derecha Proud Boys, vestidos de negro y algunos con cascos y chalecos antibalas, estaban entre los manifestantes. Algunos grupos de izquierda planearon contramanifestaciones, pero no hubo informes de incidentes importantes.
La caravana de Trump se desplazó lentamente entre la multitud camino a su campo de golf en Sterling, Virginia. Un video en las redes sociales mostró a Trump, con una gorra de béisbol roja, saludando a sus seguidores desde el interior de la limusina presidencial.
Por su parte, Biden dijo a periodistas en Delaware que estaba trabajando en la formación de su gabinete.
Biden solidificó más su victoria el viernes cuando resultados de Edison Research lo mostraron como el ganador de Georgia, lo que le dio un recuento final de 306 votos del Colegio Electoral, mucho más de los 270 necesarios para ser elegido presidente y por encima de los 232 de Trump.
Los 306 votos equivalieron a los resultados que tuvo Trump en su victoria de 2016 sobre Hillary Clinton, que en ese momento calificó de “aplastante”.
Trump pareció brevemente cerca de reconocer la probabilidad de que abandone la Casa Blanca en enero durante los comentarios sobre la respuesta al coronavirus en un evento de la Casa Blanca el viernes.
“Esta administración no irá a un bloqueo. Ojalá, eh, pase lo que pase en el futuro, ¿quién sabe qué administración será? Supongo que el tiempo lo dirá”, dijo Trump.
Con el resultado de las elecciones cada vez más claro, Trump ha discutido con sus asesores posibles empresas y apariciones en los medios que lo mantendrían en el centro de atención antes de una posible candidatura a la Casa Blanca en 2024, dijeron sus asesores.
Sus seguidores estaban entusiasmados el sábado.
Mike Seneca se ubicó cerca de Freedom Plaza con su perro Zena, que llevaba una camiseta roja estampada con “All American Dog”. “Es difícil creer que no hubiera ganado”, dijo Seneca, replicando las infundadas acusaciones de Trump de que los votos por correo que favorecían a Biden eran fraudulentas.
Donald Tarca Jr., quien viajó a Washington desde West Palm Beach, Florida, sostenía una enorme bandera estadounidense con un retrato gigante de Trump.
“Creo que fue manipulada en múltiples frentes”, declaró sobre la elección. “Además, los medios de comunicación estaban tan sesgados que convencieron a millones de estadounidenses de votar por Biden. Odian a Trump”.