Autoridades judiciales de Fort Myers, en Florida, condenaron a Sheila O’Leary, de 38 años, a cadena perpetua por el asesinato de su hijo de año y medio, quien falleció por desnutrición en 2019, tras ser sometido a una estricta dieta vegana.
La mujer fue declarada culpable en junio por homicidio en primer grado, maltrato infantil con agravantes, homicidio involuntario con agravantes, maltrato infantil y dos cargos de negligencia infantil por la muerte de Ezra O’Leary.
El esposo de Sheila, Ryan Patrick O’Leary, quien también es vegano y estaba de acuerdo con la dieta, permanece en la cárcel en espera de un juicio por los mismos cargos.
Según las investigaciones, la familia solo comía frutas y verduras crudas, aunque al niño también le daban leche materna, pero el menor pesaba 7.7 kilos y tenía el tamaño de un bebé de 7 meses cuando falleció en septiembre de 2019.
Según el Daily Mail, ese día la mujer llamó al 911 porque su hijo no respiraba. Cuando los servicios médicos llegaron a la vivienda encontraron al niño sin vida, con bajo peso y pequeño tamaño. Fueron arrestados dos meses después.
Los investigadores señalaron que la pareja, residente de la localidad Cape Coral, al sureste de Florida, tiene otros dos hijos, de 3 y 5 años, que también estaban desnutridos. Un cuarto niño había sido devuelto a su padre biológico durante un caso anterior de desnutrición en Virginia, según los registros judiciales.
El canal local WINK informó que Lee Hollander, el abogado de la mujer, aseguró que la pareja apelará el veredicto que se dio a conocer en una corte del condado de Lee, que se dio por juicio luego de que Sheila rechazó un acuerdo con la Fiscalía estatal que la sentenciaría a 30 años de cárcel.
Con información de Proceso.
