La Cancillería mexicana insistió hoy en que “las y los migrantes no deben dirigirse a la frontera entre México y los Estados Unidos”, incluso después del anuncio de que el gobierno estadunidense de Joe Biden procesará los casos de solicitantes de asilo devueltos a México bajo los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), mejor conocidos como plan Quédate en México.
“Las medidas anunciadas por el Departamento de Seguridad Interna (DHS) están dirigidas a un grupo específico de personas que forman parte de los MPP y que las restricciones y requerimientos legales para el ingreso a México y Estados Unidos continúan vigentes”, planteó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en un comunicado emitido por la tarde.
El canciller Marcelo Ebrard Casaubón negoció y pactó con el gobierno de Donald Trump la aplicación del plan Quédate en México; bajo este esquema, las autoridades de Estados Unidos devolvieron más de 70 mil solicitantes de asilo extranjeros a México, donde supuestamente esperaban que un tribunal de migración atendiera sus casos.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han criticado con vehemencia ese plan, pues arrojó a decenas de miles de personas a ciudades fronterizas, sin apoyo y expuestas a graves violaciones a sus derechos humanos.
Hoy, Alejandro Mayorkas, el titular del DHS en la administración Biden, anunció que el próximo 19 de febrero empezará a admitir solicitantes de asilo expulsados a México bajo los MPP, pero indicó que por el momento todas las personas deben esperar “nuevas instrucciones” sin acercarse a la frontera.
La Cancillería mexicana, por su parte, indicó que “ambos gobiernos y las organizaciones internacionales aliadas proveerán más información para aquellas personas migrantes sujetas al MPP”, y recordó que las limitaciones de entradas a Estados Unidos por la pandemia de covid-19 siguen vigentes.
Con información de Apro.