El presidente Joe Biden ofrecerá el jueves un inusual discurso en horario de máxima audiencia para presionar al Congreso para que apruebe leyes para controlar las armas, después de que una serie de tiroteos renovaron los llamamientos para abordar el mortal problema en Estados Unidos.
El presidente hablará a las 2330 GMT desde la Casa Blanca, en su oficina y en la franja horaria de la noche para llegar a una amplia audiencia, y subrayar su compromiso de cambiar las leyes de armas de Estados Unidos a pesar de que el Congreso no ha tomado medidas.
Estados Unidos, que tiene una tasa de muertes por armas de fuego más alta que cualquier otro país de ingresos altos, se ha visto sacudido en las últimas semanas por tiroteos en una tienda de comestibles en Nueva York, una escuela primaria en Texas y en un edificio médico en Oklahoma.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que Biden renovará su llamamiento a la acción del Congreso para luchar contra la “epidemia” de la violencia armada.
“Está animado por lo que estamos viendo en el Capitolio”, dijo sobre las conversaciones bipartidistas entre los legisladores del Capitolio.
“Los pensamientos y las oraciones son importantes, pero no son suficientes. Necesitamos que el Congreso actúe”, dijo la vicepresidenta Kamala Harris en un acto celebrado el jueves antes del discurso de Biden.
Los defensores de la seguridad de las armas han presionado a Biden para que tome medidas más contundentes por su cuenta para frenar la violencia de las armas, pero la Casa Blanca quiere que el Congreso apruebe una legislación que tenga un impacto más duradero que cualquier decreto presidencial.
Un comité de la Cámara de Representantes de Estados Unidos estaba trabajando el jueves en un proyecto de ley destinado a endurecer las leyes nacionales sobre armas, aunque la medida tiene pocas posibilidades de ser aprobada por el Senado.
El discurso nocturno de Biden tiene como objetivo presionar aún más a los legisladores y mantener el tema en la mente de los votantes, dijo la Casa Blanca.
Más de 18.000 personas han muerto a causa de la violencia con armas de fuego en Estados Unidos en 2022, lo que incluye homicidios y suicidios, según Gun Violence Archive, un grupo de investigación sin ánimo de lucro.
Canadá, Australia y Gran Bretaña aprobaron leyes de armas más estrictas después de tiroteos masivos en esos países, prohibiendo las armas de asalto y aumentando los controles de antecedentes.
Con información de Reuters.
