La Guardia Costera de Estados Unidos tenía previsto dar detalles el miércoles sobre la búsqueda de 39 personas desaparecidas tras el vuelco de su embarcación en el Océano Atlántico frente a las costas del estado de Florida, en lo que se considera un intento de tráfico de personas que salió mal.
Las autoridades tenían previsto celebrar la sesión informativa en Miami un día después de que una persona encontró a un hombre encaramado al casco casi sumergido de la embarcación volcada y lo rescató.
La persona alertó a los guardacostas, que enviaron barcos y aviones de rescate para buscar más víctimas. El superviviente dijo a las autoridades que salió de las islas Bimini de las Bahamas, a unos 80 kilómetros al este de Miami, en una embarcación con otras 39 personas el sábado por la noche, dijo la Guardia Costera en un comunicado publicado en Internet.
Según el sobreviviente, el bote volcó el domingo por la mañana al encontrarse con mal tiempo a unos 72 kilómetros al este de Fort Pierce Inlet, frente a la costa atlántica de Florida, más o menos a medio camino entre Miami y Cabo Cañaveral, pero nadie llevaba chaleco salvavidas, dijo la Guardia Costera.
El sobreviviente fue trasladado a un hospital para ser tratado por deshidratación y exposición al sol.
El incidente coincidió con una advertencia para embarcaciones pequeñas en la zona, con vientos constantes de hasta 37 kilómetros por hora y olas de 3 metros, según la Guardia Costera.
Hasta el miércoles por la mañana, las tripulaciones de los guardacostas, los equipos de helicópteros, los aviones de búsqueda y una tripulación aérea de la Marina estadounidense recorrieron un área que abarca más de 3.367 kilómetros cuadrados -aproximadamente el tamaño de Rhode Island- entre Bimini y Fort Pierce Inlet, según el comunicado.
La agencia dijo en un mensaje anterior de Twitter que el incidente estaba siendo investigado como “un posible caso de tráfico de personas”. Sin embargo, aún no se ha determinado la nacionalidad de las personas que iban en la embarcación, dijo un portavoz de la Guardia Costera, el suboficial José Hernández.
Con información de Proceso.
