La encargada de la sección “Quién es quién en las mentiras de la semana”, Ana Elizabeth García Vilchis afirmó, que el vocero de la campaña #SélvameDelTren, Gustavo Adolfo Alanís Ortega, “buscó asesorar” a Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), antes de manifestarse en contra del proyecto del Tren Maya.
Incluso, exhibió en pantalla un contrato en el que al dirigente de la asociación civil denominada Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) le pagaron 800 mil pesos por concepto de adjudicación directa para “apoyar la ejecución del comité de vigilancia ambiental”, del frustrado aeropuerto de Texcoco del primero de mayo al 31 de diciembre de 2015.
En ese entonces Alanís Ortega, quien también se desempeña como articulista en los periódicos El Universal y Reforma, trabajó para la empresa Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México que realizaba la planeación, el diseño y la construcción del fallido proyecto, explicó la funcionaria federal.
“Ahora promueve amparos contra el Tren Maya y encabeza la campaña #Selvame junto con artistas, organizaciones y asociaciones civiles, pero antes buscó asesorar a Fonatur para la construcción del Tren Maya, ahí se los dejamos, una lindeza”, aseguró García Vilchis.
En la conferencia mañanera, la funcionaria federal también señaló que el diputado federal panista Gabriel Ricardo Quadri de la Torre también recibió dinero por asesorar a las dependencias federales y empresas que se encargaban de la construcción del aeropuerto fallido de Texcoco.
Incluso, dijo que el ex candidato presidencial es uno de los “críticos más beligerantes” del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AIFA), y calificó como “absurdos”, los ataques contra la declaratoria del Lago de Texcoco como área natural protegida.
Luego dio lectura a una postura asumida por Quadri en el periódico El Economista donde afirmó que “el vaso de Texcoco, no tiene ningún valor ambiental que no pueda ser compensado, es un páramo salitroso con algunos cuerpos de agua o humedales mínimos estacionales”.
No obstante, García Vilchis aseguró que Gabriel Quadri tiene un conflicto de interés al hablar del lago de Texcoco porque en 2015, recibió 450 mil pesos, a través de un contrato con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), por concepto de asesoría en temas de desarrollo urbano, territorial y regional en el proyecto del aeropuerto de Texcoco, que incluía la construcción de un desarrollo inmobiliario y centros comerciales de lujo, aseguró la funcionaria federal.
Por ello, dijo que la actitud de Gabriel Quadri y Gustavo Alanís frente a los proyectos del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, es la de un grupo de “ecologistas con intereses que apoyan obras, si los contratan como asesores o se oponen a las obras, si los contratan para interponer amparos”, indicó.
“Salieron a volar los zopilotes”
Por último, García Vilchis cuestionó las notas que hablaron de una balacera en el aeropuerto de Cancún que al final fue desmentida.
“Con falsa balacera en el aeropuerto de Cancún salieron a volar los zopilotes y publicaron versiones alarmistas sin confirmar. El lunes 28 de marzo un estruendo provocado por la caída unas torres de publicidad causaron pánico y confusión entre los pasajeros de la Terminal 3 del Aeropuerto Internacional de Cancún, en Quintana Roo.
“Aún sin saber qué había pasado circularon videos de gente corriendo. Muy rápido se esparció el rumor de que se habían producido detonaciones de arma de fuego, por lo que los empleados del aeropuerto declararon código rojo”, detalló García Vilchis, quien resaltó que comunicadores y medios profesionales se montaron en el amarillismo sin confirmar la información.
“Así lo hicieron, vemos en la pantalla, no pocos: Reforma, Reporte Índigo, Sopitas, Ruido en la Red, El Financiero, Político MX, Animal Político, incluso comunicadores con cierta… dieron como cierta la versión de los disparos, comunicadores experimentados como Joaquín López-Dóriga, Hannia Novell, Azucena Uresti y Carlos Loret de Mola por supuesto”, cuestionó García Vilchis.
Con información de Proceso.