El tráfico de camiones comerciales desde el estado mexicano Chihuahua hacia Texas volverá a la normalidad, luego de que ambas partes alcanzaran un acuerdo de seguridad fronteriza, dijo el gobernador texano, Greg Abbott.
El gobierno de Chihuahua entregó un plan que permitirá a las autoridades de Texas detener las intensas inspecciones que entorpecieron el tránsito de camiones durante la última semana, detalló el funcionario en una conferencia de prensa conjunta con María Eugenia Campos, gobernadora de ese estado mexicano.
Abbott, un republicano que busca reelegirse en noviembre, ordenó la semana pasada realizar inspecciones de seguridad más exhaustivas a vehículos que cruzan los puertos de entrada a Estados Unidos desde México, como una medida para evitar el tráfico de personas y contrabando.
Las inspecciones fueron parte de un esfuerzo más amplio para disuadir la inmigración indocumentada que incluyó el transporte de migrantes a Washington y tenía como objetivo contrarrestar las políticas de “fronteras abiertas” del presidente demócrata Joe Biden, dijo Abbott.
Los camioneros mexicanos bloquearon los puentes en la frontera de Estados Unidos a principios de semana para protestar por los retrasos, que según algunos conductores provocaron esperas de más de medio día.
“Esta es una excelente noticia, justo ahora tengo dos camiones formados esperando cruzar por Pharr y otros dos por Progreso”, dijo el jueves Juan Treviño, propietario de varios camiones en el fronterizo estado mexicano Tamaulipas. “Esperamos que pronto esto se pueda normalizar porque ha sido un momento muy difícil para nosotros”.
Abbott anunció el miércoles que Texas cesaría sendas inspecciones del estado mexicano Nuevo León después de haber llegado a un convenio de seguridad con el gobernador local. Los operativos continuarán en otras partes de la frontera hasta que se alcancen acuerdos con esos estados, sostuvo.