La utilización de psicofármacos es segura para el periodo de gestión y lactancia del bebé. Para llevarlo a cabo es necesaria una adecuada monitorización que contribuya a minimizar los posibles efectos adversos.
En los primeros días de agosto se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna 2021. Por ello, el Hospital de Salud Mental de Tijuana A.C. realizó la plática “Lactancia materna y psicotrópicos”, impartida por la doctora Alma Duarte García, la cual describió la importancia del tema.
“Si eres una mamá con antecedentes personales de depresión postparto o antecedentes personales de un trastorno de ansiedad, depresión, bipolar o cualquiera que sea el caso o que se tenga algún familiar o varios familiares que hayan tenido trastornos, va ser importante que recibas una valoración por parte de un médico psiquiatra”, explicó la médico.
Para que el binomio madre-bebé pueda desarrollarse de la mejor manera, es clave la temprana intervención de diferentes profesionales de la salud, ya que si bien sobre la marcha también se pueden adoptar tratamientos, el escenario ideal es la planificación, según apuntó Duarte García.
“Es para que con su médico psiquiatra puedan medir los riesgos, los beneficios, alternativas y que tan idóneo es el tratamiento farmacológico e incluso el riesgo de no recibir el tratamiento”, subrayó.
Los riesgos de no recibir atención darían como resultado problemas tanto en la madre como en el bebé.
“La depresión y todos sus análogos pueden llevar a un inadecuado aumento de peso materno, abuso de sustancias, a preclamsia, que es donde se les sube la presión, que tengan un parto pretérmino, que tengan bajo peso al nacer los bebés”, dijo la médico.
También hay posibilidad de que el nacimiento sea por cesaría o que se requiera la utilización de la unidad de cuidados intensivos de recién nacidos, que haya deterioro neurocognitivo en el bebé, problemas conductuales y déficit sociales, alto riesgo de episodio psicótico, que caiga en abuso de sustancias, entre otras, de acuerdo a lo añadido por la Duarte García.
La doctora hizo énfasis que antes de tomar cualquier decisión sobre tratamientos con psicofármacos, previo, durante o después del embarazo, incluyendo la lactancia, deben de acompañarse por médicos psiquiatras y otros especialistas de la salud que aporten a una mejor gestación del bebé y bienestar de la madre.