El 12 de noviembre de 2021 se publicó en el Diario Oficial de Baja California la despenalización del aborto hasta la semana 12. Sin embargo, una clínica que en la CDMX lleva 15 años operando no ha logrado ofrecer sus servicios pues un consejo médico les negó el permiso para abrir un consultorio.
Profem, que ofrece interrupción legal del embarazo (ILE) en la capital del país intentó ser la primera clínica privada en abrir un consultorio en Tijuana para realizar interrupciones, únicamente con medicamento y asesoría médica. Para ello rentaron un espacio en la torre New City Medical Plaza por una mensualidad de mil dólares, según consta el contrato de arrendamiento.
Cuando estaban por iniciar funciones, el 1 de marzo, se les negó el acceso asegurando que el consejo médico se reservaba su derecho de admisión por ser un tema “controversial”, a pesar de que está legalizado desde el año pasado a nivel estatal.
“Nos pusieron 50 mil peros, nos presentamos y no nos dejan atender, lo hicimos en el lobby, se nos fueron seis pacientes, el comité es provida”, dijo Luisa García, directora de Profem, quien añadió que los médicos miembros del comité de la torre médica ni siquiera estaban al tanto de que el aborto ya estuviera despenalizado en su estado.
“No importa que estén a favor o en contra, es legal, ningún reglamento interno está por encima de la Constitución”, sostuvo.
Las razones que dio el comité médico de New City Medical Plaza, una torre ubicada en la zona urbana Río Tijuana, y que incluso se promociona en inglés como un lugar de turismo médico, es que Profem no envió su licencia sanitaria con dirección en Baja California, y que el estado, si bien lo despenalizó, no ha habilitado los protocolos correspondientes para instituciones de salud públicas y privadas.
Profem, por su parte, aseguró que están intentando abrir un consultorio y no una clínica, tal y como está asentado en el Diario Oficial.