Esta mañana, un grupo de pescadores bloqueó la carretera transpeninsular en el tramo que va desde la cabecera municipal de Comondú hacia Ciudad Insurgentes. La protesta surge ante la inminente llegada de un barco de la organización Sea Shepherd Conservation Society, que ha sido enviado al estado para iniciar la vigilancia en las áreas de Cabo San Lázaro y Punta Abreojos en Baja California Sur.
La operación es parte de un acuerdo entre la Secretaría de Marina-Armada de México y la organización Sea Shepherd, destinado a proteger a la tortuga marina Caretta caretta en el Golfo de Ulloa y reducir la alta tasa de mortalidad en esa costa. El barco está equipado con tecnología avanzada para la recogida de datos, incluyendo sonar, radares, drones y sistemas de vigilancia en agua, y trabajará en colaboración con la Secretaría de Marina.
La medida se justifica por los datos de la Ley General de Vida Silvestre en México, que indican que entre 2018 y 2020 fallecieron aproximadamente entre 500 y 1,000 tortugas al año en el Golfo de Ulloa, con algunas estimaciones que elevan la cifra hasta 3,000.
Sin embargo, los pescadores locales se oponen a la llegada del barco y han salido a protestar, cerrando la carretera y exigiendo una reunión con el gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío.
Según los inconformes, esto es solo un intento de justificar la entrega de casi 20 mil kilómetros cuadrados a intereses poco claros y de sacar a los pescadores del agua bajo el pretexto de que ellos son los responsables de la alta mortalidad de la tortuga amarilla.