Personas sin hogar que anteriormente habitaban la canalización del río Tijuana, en el área conocida como “El Bordo”, han comenzado a huir de ahí debido a la creciente criminalización que han vertido las autoridades sobre ellos, luego del recrudecimiento de hechos violentos en este espacio de la ciudad.
Las personas han comenzado a buscar otros sitios, principalmente de la Zona Norte y aledaños, luego de que las autoridades arrecieran la vigilancia tras el asunto del asesinato del niño Kevin Yael, y de que empezaran a sobresalir las ejecuciones entre narcomenudistas en dicha zona, las cuales han dejado varios cuerpos sin vida en el canal.
Durante un recorrido que GLOCAL MEDIA realizó por la zona, se pudo apreciar que en los distintos espacios en donde solía verse diversas concentraciones de personas al interior del canal estaban totalmente solitarios. Anteriormente eran espacios a donde acostumbraban llegar para intervenir en el consumo de sustancias psicotrópicas.
El señor José, quien es originario de Tijuana, pero llevaba más de siete años radicando en “El Bordo”, dijo en entrevista que desde hace un par de semanas decidió salir de ahí y comenzar a buscar un espacio cerca de las oficinas del PRI, en Zona Norte, porque “en el canal hay ahorita una matadera”.
Al igual que esta persona, Chuy, quien es originario de Michoacán y desde hace nueve años habitaba el canal luego de que fuera deportado de Estados Unidos, compartió que “muchos han salido ya de ahí porque las autoridades se pusieron bravos con nosotros y los policías están más cabrones que antes”.
De acuerdo con esta persona, “desde que pasó lo del niño (Kevin Yael) nos traen en chinga, como saben que nosotros consumimos (sustancias ilícitas) se dejan venir contra nosotros, a parte que ahí adentro se puso fea también la cosa, ya nadie quiere regresar”.
Para especialistas en el tema como Alfonso Ch. -así decidió identificarse-, quien trabaja con una organización con comunidades sin hogar, esta situación no le resulta nada nuevo, pues “al interior del canal siempre ha habido muertes y es sabido también que adentro se consumen sustancias prohibidas”.
Sin embargo, dijo, “es común que las autoridades siempre que les truena el problema en la mano se vayan a la fácil de criminalizar a esta población solamente por ser una comunidad potencial en el consumo de drogas”.
Julio César, otra de las personas sin hogar consultadas por GLOCAL MEDIA, reafirmó las aseveraciones del especialista al mencionar que “nosotros sabemos bien que cuando les servimos para algo a las autoridades, vienen y nos buscan y nos encierran y hacen operativos en el canal a cada rato, pero luego, ahí seguimos en el olvido”.
“El Julio”, como le gusta que le digan, es uno de los que también ya huyó del canal y ahora se la pasa cerca de las inmediaciones del Comedor Salesiano Padre Chava, o a veces mejor se va para Tecate, dice, “sobre todo cuando se calienta la zona porque no saben de dónde te llega luego el madrazo”.
Hace un par de semanas, ya las autoridades municipales y estatales anunciaron el acuerdo de una mesa de trabajo para atender esta zona de la ciudad, en donde en las últimas semanas han sido varios los cuerpos sin vida y las ejecuciones que ahí se han dado al interior del canal.