El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que la obra del Tren Maya no se va a detener y dijo que su gobierno acudirá a otra instancia con el propósito de revertir los efectos legales de la suspensión definitiva que emitió un juez federal para frenar la construcción del Tramo 5 Sur del proyecto ferroviario que conecta Playa del Carmen y Tulum, en el estado de Quintana Roo.
“La obra no se va a detener, no vamos nosotros a incumplir con mandamientos legales, tenemos la razón y se está acudiendo a otra instancia o se está presentando otro recurso, que no piense la gente, aunque hay mucha publicidad, que ya es una cosa juzgada, es un proceso abierto y estamos seguros de que tenemos la razón y que los jueces van a actuar con rectitud y no va a triunfar la corrupción y la simulación”, sostuvo.
En la conferencia mañanera, el mandatario insistió en que los amparos interpuestos por organizaciones ambientalistas son una campaña “politiquera” en contra de una obra que beneficia a la nación.
Reiteró que sus adversarios están financiados por empresas privadas nacionales y extranjeras, entre ellas Grupo Xcaret y Vulcan Materials Company, así como por el gobierno de Estados Unidos, que han contratado actores y asociaciones civiles, entre ellas Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad, de Claudio X. González, para impulsar un golpe político blando.
“El amparo no tiene fundamento, este es un asunto politiquero, quienes no quieren que se lleve a cabo la obra son seudo ambientalistas financiados por gobiernos extranjeros, hay ambientalistas financiados por el gobierno de Estados Unidos”, dijo y agregó:
“Estamos seguros de que la obra va a continuar, no van a poder detenernos, no van a imponerse los intereses particulares, no van a estar por encima del interés general, del interés del pueblo, del interés de la nación”, enfatizó AMLO.
Luego, comentó que el problema de fondo en el Tramo 5 Sur es la molestia que existe entre los directivos de Grupo Xcaret y Vulcan Materials Company porque el gobierno federal ha clausurado obras de ambas compañías por causar daños ecológicos irreversibles en mantos freáticos, subsuelo, cenotes y el mar Caribe, en el sureste mexicano.
Con información de Proceso.