Un enfrentamiento entre militares y miembros del grupo criminal apodado “los Garibay”, -están bajo las órdenes de “los chapitos”-, se enfrentaron la tarde del lunes en el Valle de Mexicali. Tras el choque, siete presuntos criminales fueron detenidos.
Entre los detenidos y heridos se encuentra Luis Alfredo Garibay Félix, alias “El Wicho”, líder del brazo armado de la célula criminal.
De acuerdo con el informe de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del estado, a las 18:31 horas se recibió una llamada al 911 donde se alertó de disparos con arma de fuego en el rancho “Garibay” que se localiza en el ejido Chiapas III.
Al lugar llegaron integrantes de la policía municipal, de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional, suscitándose un enfrentamiento entre miembros de seguridad y el grupo criminal.
El resultado fue siete personas detenidas: Manuel Antonio “N”, de 23 años, Juan Antonio “N”, de 21 años, Jesús Omar “N”, de 52 años, Luis Mario “N”, de 17 años, Adrián “N”, de 22 años y Luis Alfredo “N”, de 30 años, apodado “El Wicho”. También se aseguró una pistola calibre 50, tres R-15 y tres AK-47.
Desde hace dos años, los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael “El Mayo” Zambada se disputan la zona rural de Mexicali misma que colinda con la ciudad de San Luis Río Colorado, en el estado de Sonora.
En esta lucha, “los chapitos” enviaron a su brazo armado “los Salazar” a pelear la plaza. Desde hace tres décadas, el grupo delictivo local de “los Garibay” dominaba el valle de Mexicali. Ya disminuidos, “los Garibay” se subordinaron a “los Salazar”.
En tanto que “El Mayo” Zambada, envió a Jesús Alexander Sánchez Félix, “El Ruso” y a Felpe Eduardo Barajas Lozano, “El Omega”, a defender la plaza. este último fue detenido el 27 de diciembre pasado.
“Los Salazar” son el grupo delictivo predominante el San Luis Río Colorado y El Golfo de Santa Clara, ambos ubicados en el estado de Sonora, y también colindantes con el valle de Mexicali.
Los ejidos Chiapas I, II y III, están cercanos al ejido Hermosillo, lugar donde, el 22 de noviembre, el Ejército y la Guardia Nacional, realizaron uno de los decomisos de fentanilo más grande de la historia, luego de que la avioneta aterrizó en los caminos de terracería del ejido. El avión, según la propia Sedena fue detectada desde que salió de Los Mochis, Sinaloa.
Con información de Proceso.
