Los talibanes golpearon, dispararon y le cortaron la garganta a Nazar Mohammad, conocido como Khasha Zwan, un famoso comediante que vivía en Kandahar y se burlaba en TikTok del Talibán. Eso ocurrió tras ser secuestrado el 22 de julio pasado.

 

“Al parecer, las fuerzas de los talibanes ejecutaron a Khasha Zwan, quien se burlaba de los líderes talibanes. Su asesinato y otros abusos recientes demuestran la voluntad de los comandantes talibanes de aplastar violentamente, incluso a las críticas u objeciones más dóciles”, aseguró la directora asociada para Asia de Human Right Watch (HRW), Patricia Gossman.

Los talibanes grabaron el asesinato de Mohammad, quien también trabajó en la policía local, y lo difundieron en redes sociales, a pesar de que sus líderes habían ordenado a sus combatientes actuar con moderación, denunció HRW.

“En Kandahar, los talibanes han estado deteniendo y ejecutando a presuntos miembros del gobierno provincial y las fuerzas de seguridad, y en algunos casos a sus familiares”, apuntó Gossman.

En redes sociales apareció un video de dos hombres abofeteando al comediante, y después admitieron que dos de sus combatientes lo habían asesinado.

 

Activistas en Kandahar denunciaron que en las aldeas que rodean la capital provincial, los talibanes han detenido a decenas de personas asociadas con el gobierno o la policía.

El 16 de julio pasado, combatientes talibanes secuestraron a dos hombres cuyos hermanos trabajaron con NDS 03, una fuerza de ataque respaldada por la CIA de Estados Unidos, responsable de ejecuciones sumarias y abusos en el área de Qasam Pol, distrito de Dand. Hasta el momento nada se sabe de ellos.

A mediados de julio, los talibanes aprehendieron a Ahmadullah, un exoficial de policía en Spin Boldak, y su familia tampoco sabe nada de él, mientras su tío denunció que los combatientes talibanes han enviado cartas avisando que cualquier persona que haya trabajado con el gobierno o las fuerzas extranjeras no sufrirá daños, siempre y cuando den informes a los talibanes y “admitan su crimen”.

“Las fuerzas talibanes que avanzan no tienen un cheque en blanco para atacar brutalmente a sus críticos. Los líderes talibanes generalmente niegan los abusos, pero son sus combatientes los que llevan a cabo estos ataques y su responsabilidad es detener los asesinatos”, dijo Gossman.

“Lo mismo ocurre con los talibanes que matan a la gente porque hacen reír a la gente y la mentalidad que quema a los que cantan en turco”, escribió Serbest en redes sociales.

“La Corte Penal Internacional está investigando actualmente las denuncias de crímenes de guerra y graves abusos contra los derechos humanos cometidos por todas las partes del conflicto en Afganistán, incluidos los talibanes”, señaló HRW.

Añadió: “Los comandantes talibanes que sabían o deberían haber sabido de los abusos cometidos por las fuerzas bajo su control y no tomaron ninguna medida para prevenirlos o detenerlos son culpables como una cuestión de responsabilidad de mando”.

Con información de Proceso.

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