Los atletas deben llevar mascarillas en todas las sedes de los Juegos de Tokio, incluyendo las ceremonias de entrega de medallas, dijo el domingo el Comité Olímpico Internacional, pero una nueva política les permite quitárselas brevemente en el podio para hacerse una foto.
Las mascarillas son obligatorias en todas las sedes, tanto en el interior como en el exterior, para atletas, personal y representantes de medios de prensa, como parte de las estrictas medidas de los organizadores de los Juegos para combatir el coronavirus.
“No es algo optativo. Es una obligación”, dijo el portavoz del COI Mark Adams. “No hay ninguna relajación y exhortamos a todos a que obedezcan (…) Es importante para el deporte, para todos los implicados y para nuestros amigos japoneses, y enviará un mensaje fuerte”.
Pero el COI destacó que los atletas pueden quitarse las mascarillas durante 30 segundos para hacerse una foto.
Tras las finales de natación el domingo por la mañana, el estadounidense Chase Kalisz se quitó la mascarilla en el podio tras ganar el oro en los 400 metros medley masculinos.
Kalisz estaba junto a su compatriota Jay Literland, medallista de plata y que tampoco estaba usando mascarilla, lo mismo que el australiano Brendon Smith, que se llevó el bronce.
“Los nadadores (…) siguieron las instrucciones que les dio el equipo de protocolo”, dijo un portavoz del COI. “Se da la oportunidad de una foto socialmente distanciada durante un máximo de 30 segundos en el podio”.
Los Juegos de Tokio se celebran sin espectadores en la mayoría de las pruebas, ya que en la capital se ha producido un aumento de los casos diarios de COVID-19 en las últimas semanas.
Las 12 nadadoras de Australia, Canadá y Estados Unidos presentes en el podio de la ceremonia de la posta 4×100 metros libres femenina no llevaban mascarillas y sonreían a los fotógrafos.
Los organizadores anunciaron el domingo otros 10 positivos de COVID-19 en personas relacionadas con los Juegos, lo que eleva el total a 132 casos desde el 1 de julio.