17 sep (Reuters) – El presidente de la Generalitat de Cataluña advirtió el jueves a las autoridades españolas que su posible destitución obstaculizaría la respuesta de la región al coronavirus, al desencadenar unas elecciones innecesarias y alimentar las tensiones políticas.
“Si el Estado español llega a un punto de tan absoluta irresponsabilidad como para descalificarme, solo un partido tiene la culpa: el propio Estado”, dijo Quim Torra en Madrid tras una audiencia en el Tribunal Supremo de su recurso contra el fallo del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) por desobedecer a la Junta Electoral.
El caso se deriva de la negativa de Torra a seguir las órdenes de la Junta Electoral Central de eliminar una pancarta colgada en la facha del Palau de la Generalitat en apoyo a los líderes independentistas encarcelados y autoexiliados durante una campaña electoral nacional en 2019.
Si se mantiene, el fallo le impediría ocupar cargos públicos, lo que provocaría unas elecciones precipitadas, que Torra sostuvo que ahora quiere evitar a pesar de haber dicho, antes de la pandemia, que las convocaría este año.
Torra dijo que su responsabilidad como líder regional “significa luchar contra la pandemia las 24 horas del día”, por lo que su destitución significaría “un castigo para todo un país en medio de una pandemia”.
“No soy yo quien va a llevar a este país, en un momento tan crítico, a un período electoral irresponsable que paralizará la administración catalana”, señaló.
Cataluña ha sido uno de los epicentros de la pandemia en España, uno de los países más afectados del mundo.
En diciembre, el tribunal supremo de Cataluña declaró a Torra culpable de un delito de desobediencia y a una pena de 18 meses de inhabilitación especial para ejercer cargos públicos, pero la prohibición no se hizo efectiva debido a su recurso.