CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las últimas declaraciones y decisiones del gobierno lópezobradorista en materia ambiental reflejan no sólo una falta de interés, sino evidentes retrocesos, de acuerdo con el extitular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor M. Toledo.
En un artículo publicado este martes en el diario La Jornada, Toledo considera que, a pesar de que el gobierno se ha declarado contra el neoliberalismo, está reproduciendo sus prácticas y visiones, ocasionando retrocesos en temas como energía, alimentos, megaproyectos y el presupuesto.
“El desdén que ha mostrado el gobierno de la 4T por la transición a energías renovables raya en el absurdo, cuando oficialmente las reservas probadas del petróleo, que será cada vez más caro, no dan más que para unos ocho a 10 años, y cinco años en el caso del gas”, expone.
El exfuncionario, que dejó su cargo a inicios de septiembre pasado luego de ventilarse una grabación en la que revela fuertes pugnas en el gabinete presidencial, atribuye a la adicción a los combustibles fósiles “las declaraciones tecnocráticas y cortoplacistas del presidente”, como cuando declaró que “las energías limpias son un sofisma… lo que se necesita es comprar más carbón” en Coahuila el 24 de octubre pasado.
También recuerda que la secretaria de Energía, Rocío Nahle, declaró ante el Senado de la República que la energía nuclear “es continua, segura y efectiva […] ya es tiempo de que en México se hable de la energía nuclear, un tema vetado, porque es una energía muy benéfica” el 27 de octubre pasado.
Toledo rememora que “el gobierno de la 4T construirá una nueva planta carbonífera, el combustible más contaminante que se conoce, con un costo de mil 120 millones de dólares, equivalente a todo el presupuesto de la Semarnat en 2019, y pretende construir una nueva planta nuclear en Baja California, ahí donde la radiación solar alcanza su máxima potencia, y donde una superficie de sólo 2 mil kilómetros cuadrados (45 por 45 kilómetros) puede generar energía eléctrica para cubrir las necesidades de ¡todo el país!”.
Al referirse a la energía nuclear, resalta que el uranio y la tecnología deberán importarse por lo que no se tendrá soberanía energética, “que un reactor cuesta al menos unos 210 mil millones de pesos, que no está resuelto el confinamiento de los residuos radiactivos, y que negar el riesgo de los accidentes es, para decir lo menos, un acto inmoral”.
Además, denuncia la obsesión del gobierno por la energía fósil, la cual, comenta, “se expresa en los mil 174 miles de millones de pesos del presupuesto 2020 que resultan de la suma de lo asignado a Pemex, la CFE y la Sener, donde se desmanteló la pequeña oficina dedicada a energías alternativas y se despidió al equipo técnico”.
El biólogo de la UNAM destaca que “México es una de las cinco regiones con mayor radiación solar del mundo y con yacimientos de litio para desarrollar una industria de autos eléctricos, además de abundantes recursos hidráulicos, eólicos y geotérmicos. La mesa está puesta para que la 4T diseñe una ruta antineoliberal con soberanía, con los ciudadanos, con empresas públicas, sociales y privadas, y de pequeña y mediana escala”.
Asimismo, Toledo resalta que, aunque el país sólo contribuye con 1.7% de los gases invernadero, está entre las cuatro naciones más afectadas por el calentamiento global con fenómenos como huracanes, sequías y el aumento altitudinal de la temperatura y aun así no está tomando acciones climáticas mientras que los gobiernos de todo el mundo están sumando esfuerzos al respecto.
El experto alerta que México no está tomando acciones climáticas mientras que los gobiernos de todo el mundo están sumando esfuerzos al respecto y destacó los casos de Francia e Inglaterra, en los que surgieron parlamentos ciudadanos por el clima, y China, que se ha propuesto transitar hacia una ¡civilización ecológica para 2035.
“Al menos los gobiernos neoliberales dejaron para la historia un compromiso del país con los Acuerdos de París, un Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (Inecc) y una Comisión Intersecretarial. Por lo contrario, en el gobierno de la 4T parece estar vetado hablar de la crisis del clima, el presupuesto del Inecc ha sido reducido en 2019, 2020 y 2021, y no hemos escuchado una sola mañanera en la que se trate el tema”, acusa.
Toledo renunció a la Semarnat tres semanas después de que circulara un audio en el que expresaba que el gobierno de la 4T era uno de contradicciones y donde expuso que el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos, privilegia los agronegocios, está en contra de la agroecología y trata de imponer la visión de las grandes corporaciones en esta materia.
En ese entonces, comentó que había sido convocado por el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo a tres reuniones, junto con Villalobos, para presionarlo sobre la utilización del glifosato, mientras que miembros del gabinete y subsecretarios de gobernación trataron de convencerlo para apoyar agronegocios y ser más flexible con empresas como la cervecera Constellation Brands y Grupo México.