Nadie está a salvo de la llamada “cultura de la cancelación”, dijo el miércoles la estrella de cine estadounidense Johnny Depp en el Festival de Cine de San Sebastián, a donde viajó para recibir el Premio Donostia, máximo galardón del certamen por sus casi 40 años de carrera en la pantalla.
Depp, de 58 años, perdió el año pasado una batalla legal por difamación contra un tabloide británico que lo tildó de “maltratador de mujeres”, cuando un tribunal de Londres dictaminó que había agredido repetidamente a su expareja, la actriz estadounidense Amber Heard.
Desde entonces, el actor se ha quejado de haber sido boicoteado por Hollywood mientras su última película “Minamata” tenía dificultades para conseguir ser estrenada en Estados Unidos.
El miércoles, Depp denunció “esta cultura de la cancelación o esta prisa instantánea por juzgar basándose en lo que esencialmente equivale a aire contaminado que se exhala”.
“Acabaré por ir a la casa de alguien, actuaré en la fiesta de cumpleaños de su hijo a estas alturas”, dijo en una rueda de prensa, poco antes de la ceremonia de entrega del Premio Donostia.
“Nadie está a salvo mientras alguien esté dispuesto a decir una frase. Basta una frase”.
Depp ascendió al estrellato de Hollywood en la década de los 90 con interpretaciones de solitarios y marginados en clásicos de culto como “Cry Baby” de John Waters y “Eduardo Manostijeras” de Tim Burton.
Se convirtió en un nombre familiar con la franquicia de Disney “Piratas del Caribe”, interpretando al popular Jack Sparrow.
Pero fue sustituido a partir de la tercera película de la franquicia “Fantastic Beasts” tras el veredicto en su contra en el juicio por difamación de Londres.
Grupos feministas y asociaciones de la industria cinematográfica criticaron la decisión del festival donostiarra de honrar a Depp cuando se anunció el premio en agosto.
La asociación CIMA de mujeres cineastas y profesionales del sector audiovisual dijo que es “un error desde el punto de vista ético”.
En respuesta a esas críticas, el director del festival, José Luis Rebordinos, dijo que el premio es un reflejo de los logros cinematográficos de Depp que no tiene relación con su vida personal.
“La función de un festival de cine no es juzgar las conductas de los miembros de la industria cinematográfica”, dijo entonces.
Depp es el segundo galardonado este año. El viernes, la actriz francesa Marion Cotillard recibió la estatuilla de manos de la española Penélope Cruz.
Con información de Reuters.
