“Sentir, vivir y amar mucho, que nada se pierde amando”, dice el mural que la mañana de este lunes fue develado en una pared de la Facultad de Artes y Diseño (FAD) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en honor a Yaretzi Adriana Hernández Fragoso, la joven estudiante que el pasado 7 de enero perdió la vida por el choque de trenes en la Línea 3 del Metro de la Ciudad de México.
Apenas unas horas después de que inició el nuevo ciclo escolar, se reunieron frente al mural los amigos y compañeros de “Adri”, junto con sus padres César Hernández y Luz Fragoso, y el rector, Enrique Graue, y entre todos le brindaron un minuto de aplausos.
El padre de Yaretzi develó el mural lleno de girasoles, la flor preferida de su hija y agradeció a sus amigos y compañeros:
“por todo el apoyo brindado durante estos que son los días más duros y difíciles de nuestra vida… ellos han sido parte muy importante de nuestra experiencia de duelo y aceptación; con su amor nos han consolado y han hecho que nuestro dolor sea más llevadero, observamos que ellos han honrado incondicionalmente la vida y la muerte de nuestra hija”.
Con voz calmada, destacó que “hoy es un día especial, pues tengo la oportunidad de hablarles sobre el amor a través de la experiencia de Adriana. De carácter templado y sonrisa permanente, Adriana desarrolló auténticos vínculos de amor y de amistad con sus compañeros y amigos cercanos”, igual que en su familia.
“Como estudiante, definitivamente amaba estar en la FAD. Aquí veía el espacio ideal para expresar su sentir, para expresar su amor por el arte y del mismo modo, manifestar el poder creativo de su pensamiento, el cual, sin duda, nace de la esencia divina de lo que reamente somos”.
Hernández comentó que una de las lecciones que les dejó su hija fue que “su naturaleza era la de vivir amorosamente el presente, por eso en este instante es tan importante, es vívido porque es tangible… Adriana vivió en un eterno presente expresado a través de su calidad humana y del amor hacia todos aquellos quienes la rodearon”.
Y dijo que el mural “llena de alegría nuestro corazón”.
El director de la FAD, Mauricio de Jesús Juárez, se dijo “muy orgulloso” de la iniciativa de los compañeros de Yaretzi de hacer el mural: “es una forma extraordinaria de recordarla, de mantenerla viva en nuestro corazón y de que otras generaciones vayan aprendiendo esta sensibilidad que con el ejemplo, sus compañeros nos dieron”.
De Apro.
