TEGUCIGALPA, 30 dic (Reuters) – Un líder indígena y medioambiental de Honduras fue encontrado sin vida en una zona montañosa del norte del país, dijo el miércoles una fuente policial, el segundo caso en menos de una semana en la nación centroamericana, una de las más peligrosas del planeta para activistas de defensa de la tierra.
El supuesto crimen del dirigente Adán Medina tuvo lugar el domingo y se suma al de Félix Vásquez, ocurrido un día antes, en un país marcado todavía por el homicidio en 2016 de Berta Cáceres, otra líder ecologista cuya muerte fue ampliamente condenada a nivel internacional.
Medina, de la etnia tolupán, “fue encontrado muerto el domingo con cinco perforaciones (de bala) en una zona montañosa en el sector del Volcán y presuntamente fue atacado por varios hombres”, afirmó el miércoles a Reuters un oficial policial de la zona que pidió el anonimato.
Los tolupán defienden sus tierras frente a los latifundistas en la serranía de los departamentos Francisco Morazán -al centro- y Yoro -al norte-.
“Fue asesinado por su lucha en defensa de la tribu Candelaria, donde terratenientes y madereros han ocupado nuestras tierras”, dijo Noé Rodríguez, presidente de la Federación de Tribus Xicaques de Yoro (Fetrixy).
Según Rodríguez, Medina había denunciado amenazas de terratenientes ante la Fiscalía de las Etnias y el Patrimonio Cultural del Ministerio Público. Vásquez, el líder de un grupo de defensa de la tierra en el departamento central La Paz muerto el sábado, había denunciado persecución política.
La representante residente de la ONU en Honduras, Alice Shackelford, lamentó en Twitter ambos casos y urgió a las autoridades a tomar medidas. “¡Investigación rápida e identificación de los culpables lo más pronto!”, escribió.
Al menos 14 defensores de la tierra murieron de forma violenta en Honduras en 2019 frente a los cuatro crímenes registrados en 2018, lo que convierte al país centroamericano en el quinto más mortífero para ese tipo de activistas entre 21 naciones encuestadas, según el grupo de defensa Global Witness.
