Los líderes del G20 acordaron hoy que involucrarán a los talibanes en la distribución de la ayuda humanitaria internacional para Afganistán, aunque ello no implica el reconocimiento del Talibán como gobierno de ese país asiático.
“Es muy complicado ver cómo podemos ayudar la gente en Afganistán sin involucrar al Talibán”, confesó el primer ministro italiano Mario Draghi y actual presidente en turno del G20, pero insistió: “ello no implica su reconocimiento; debemos dejar claro que serán juzgados por lo que hacen, no por lo que dicen”.
La Unión Europea ha reiniciado sus programas de ayuda internacional a Afganistán, país que funciona con 75% de fondos internacionales. En un primer tiempo –después de una pausa de varios meses– sumarían alrededor de mil millones de euro,. Los voceros de los Talibán, por su parte, han pedido a la comunidad internacional descongelar los cerca de 9 mil millones de dólares de Afganistán en el mundo.
En la reunión virtual que se llevó a cabo sobre Afganistán, este jueves –en la que no participaron los presidentes de China, Xi Jinping, y de Rusia, Vladimir Putin–, Draghi también deploró que, tras la reconquista del poder de los talibanes, la situación de las mujeres dio un brinco de 20 años en el pasado.
Y el canciller de México, Marcelo Ebrard Casaubón, aprovechó su espacio en la reunión –en la que participó a nombre del presidente Andrés Manuel López Obrador– para exhortar a los talibanes a “respetar plenamente los derechos humanos de su población, en particular de las mujeres, las niñas y las minorías”.
También recordó que, desde el regreso de los talibanes al poder, el gobierno mexicano ha otorgado protección a mil 694 nacionales afganos.
Con información de Proceso.