Gilberto Rodríguez Orejuela, un antiguo jefe del poderoso cártel colombiano de Cali, murió en Estados Unidos, donde cumplía una condena de 30 años por narcotráfico, informó el miércoles su familia.
Conocido en el mundo del crimen con el alias de ‘El Ajedrecista’, Rodríguez Orejuela, de 83 años, permanecía en una cárcel de Butner, Carolina del Norte, después de que Colombia lo extraditó en el 2004 acusado del envío de decenas de toneladas de cocaína a Estados Unidos.
“Los hijos y esposa de Gilberto Rodríguez Orejuela nos permitimos informar que lamentablemente ayer, martes 31 de mayo de 2022, a las 6:54 de la tarde, falleció nuestro padre y esposo a causa de un linfoma que lo aquejaba”, dijo un comunicado de la familia difundido por su hija Alexandra.
Los familiares del antiguo capo del narcotráfico, a quien los médicos le habían diagnosticado cáncer de colon y próstata, anunciaron que iniciaron las gestiones para la repatriación del cadáver y darle una cristiana sepultura en Colombia.
Su captura, en junio de 1995 en la ciudad de Cali, marcó el comienzo del desmoronamiento de la organización que en su apogeo controló un 80% del mercado de la cocaína a nivel mundial, según reportó en su momento la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA).
Dos meses después de la captura de ‘El Ajedrecista’, su hermano Miguel Rodríguez Orejuela también fue arrestado y actualmente permanece en una prisión de Estados Unidos tras ser extraditado desde Colombia.
‘El Ajedrecista’ permaneció en una cárcel de alta seguridad de Colombia y luego de que un juez lo dejó en libertad fue capturado de nuevo y entregado a Estados Unidos, que lo solicitaba por cargos de narcotráfico.
Gilberto y su hermano Miguel enfrentaron en una violenta confrontación, que incluyó la detonación de bombas, a su enemigo del Cártel de Medellín Pablo Escobar, muerto en un operativo de la Policía Nacional en diciembre de 1993.
También financiaron una organización ilegal conocida como Los Pepes, que persiguió durante meses a Escobar en una cacería en la que cayeron varios colaboradores de su rival.
Además de sus actividades de narcotráfico, los nombres de Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela ganaron reconocimiento a nivel mundial en 1994 por denuncias de que financiaron con cinco millones de dólares la campaña política que llevó a la presidencia al político liberal Ernesto Samper.
Samper dijo que el envío de dinero del Cártel de Cali a su campaña fue a sus espaldas, sin su autorización y responsabilizó a personas que trabajaban en su campaña.
Posteriormente los Rodríguez Orejuela admitieron que además de financiar campañas electorales, pagaron sobornos a políticos, policías y militares.
Con información de Reuters.