Después de seis semanas de hospitalización por contagio de covid-19, falleció el obispo de Mexicali, José Isidro Guerrero Macías.
Originario de Iraguato, Sinaloa, el padre Chilo, como era conocido, fue un hombre controvertido, amigo de Joaquín Guzmán Loera, según dijo a la reportera Norma Luz López Pesqueira, y promovente de Jorge Hank Rhon durante la pasada contienda electoral para el gobierno del estado
El obispo fue rector del Seminario de Culiacán antes de llegar a la diócesis de Mexicali. El 20 de mayo de 2007, en entrevista con la reportera López Pesqueira del periódico Contraseña, le confesó ser amigo de un de los hombres más buscados por Estados Unidos y quien hoy está preso en dicho país.
“Mira, mi amigo El Chapo Guzmán, le bauticé como a 20 niños”, expresó a la reportera.
El obispo también realizó trabajo pastoral esencialmente como vicario cooperador en la parroquia de Badiraguato, Sinaloa; capellán en San Rafael, Culiacán y en la asistencia espiritual de diversas órdenes religiosas, según reportes del Vaticano.
Sus últimas participaciones controvertidas en la entidad fueron cuando se pronunció a favor de Jorge Hank Rhon como candidato al gobierno del estado por el Partido Encuentro Solidario (PES) y de la excandidata a la presidencia municipal de Mexicali por la alianza PAN-PRD-PRI, la panista Eva María Vásquez Hernández. Ambos perdieron.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó el 13 de enero pasado que con dichos apoyos declarativos violó la ley electoral.
El obispo Guerrero Macías es velado en la catedral de esta capital y el viernes, cuando concluya la misa, se preparará su cuerpo para ser enviado a Sinaloa, según su última voluntad.
El obispo ingresó a un hospital privado el 14 de enero por complicaciones del Sars-Cov-2; fue intubado una primera vez, mejoró por unos días pero finalmente se le volvió a colocar el respirador artificial debido a complicaciones en sus pulmones.
Guerrero Macías se ordenó en 1977 y fue designado obispo de Mexicali en 1997 por el entonces papa Juan Pablo II. Sustituyó al obispo Ulises Macías, quien fue enviado al obispado de Hermosillo, Sonora.
Con información de Proceso.