México no se va a convertir en un país por el que pueda pasar cualquiera cuando termine el polémico Título 42, dijo el martes el canciller, Marcelo Ebrard, sobre la ley de Estados Unidos que permite expulsiones de migrantes que soliciten asilo en ese país.
Estados Unidos había dicho que el 23 de mayo pondría fin al Título 42, una orden emitida en 2020 en plena pandemia del coronavirus que cerró el sistema de asilo de Estados Unidos en su frontera con México, pero recientemente un juez estadounidense frenó esa posibilidad.
Funcionarios de México y Estados Unidos han manifestado preocupación de que la eliminación de la polémica ley propicie un aumento de los flujos de inmigrantes que intentan cruzar hacia territorio estadounidense.
“Nuestro país no tiene libre tránsito para cualquier persona”, dijo Ebrard en conferencia de prensa en la embajada mexicana en Washington, tras reunirse con el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas.
“Puedes pedir refugio, puedes pedir asilo, puedes ser trabajador temporal”, añadió. “Lo que no vamos a permitir es que se asuma con o sin el problema del Título 42, o lo que Estados Unidos determine, que México se convierta en un país donde pasa quien sea y no tengamos su identidad”, enfatizó.
La oficina de Mayorkas dijo previamente que su jefe había discutido la estrategia del gobierno de Estados Unidos para poner fin al Título 42 en la reunión con Ebrard.
En los últimos años, cientos de miles de centroamericanos han cruzado por México en su camino a Estados Unidos. Cada vez más inmigrantes de otros países como Cuba y Haití también han utilizado esa misma ruta.
Como parte de un esfuerzo regional para frenar la migración, funcionarios estadounidenses aceptaron una propuesta mexicana para lanzar un programa de creación de empleo en Centroamérica en el corto plazo, añadió Ebrard.
También señaló que funcionarios estadounidenses expusieron una propuesta para que México se convierta en productor de energía limpia a gran escala, particularmente solar.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha presionado para priorizar el papel del Estado en el mercado energético, generando preocupación de Estados Unidos de que las medidas podrían obstaculizar la inversión y violar el nuevo acuerdo comercial entre Canadá, Estados Unidos y México, el TMEC.
Con información de Reuters.