Cinco linces ibéricos han sido liberados esta semana en la naturaleza en el sur de España como parte de un programa de cría en expansión destinado a conservar una de las especies de felinos más amenazadas del mundo, con sus característicos mechones negros y largos en las orejas.
Saliendo de sus jaulas uno a uno, Saturno y Sotillo, dos linces machos criados en cautividad, y dos hembras nacidas en libertad, Solera e Ilexa, junto con su cría Terre, serán libres para reproducirse y poblar la zona montañosa de Sierra Arana, en la provincia andaluza de Granada.
“El objetivo específico de este proyecto es crear aquí un área de reintroducción”, declaró el coordinador regional del programa, Javier Salcedo. “Esto para nosotros es un hito más, un avance más, en el cumplimiento del proyecto”.
En 2002, el lince ibérico estaba al borde de la extinción debido a la caza furtiva, los accidentes de carretera y la invasión de su hábitat por la agricultura. En aquel momento sólo había 94 ejemplares registrados en España y ninguno en Portugal.
En 2015, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) rebajó el nivel de amenaza de “en peligro crítico” a “en peligro”, lo que, según el Ministerio para la Transición Ecológica español, se debió a los esfuerzos de conservación en curso.
En un gran salto, la población de linces ibéricos en Portugal y España superó los 1.000 ejemplares a finales de 2020.
Sólo en Andalucía hay actualmente 522 linces ibéricos en diferentes núcleos de población de la región, dijo Guiseppe Aloisio, director del departamento regional de bosques y biodiversidad.
“Es un éxito de Andalucía. Como tierra ha podido multiplicar por cinco el censo tan crítico que teníamos hace 20 años”, dijo a los periodistas tras la liberación de los cinco felinos salvajes.
Para ser clasificada como especie no amenazada, la población de linces ibéricos debería superar al menos los 3.000 ejemplares, incluidas 750 hembras reproductoras, según el grupo internacional de conservación de la vida salvaje WWF.
Con info de Reuters.