El Tribunal Supremo de Manhattan recibió una denuncia en contra del músico Bob Dylan por abusar sexualmente de una menor en Nueva York, hace 56 años.
Según la denunciante, que ahora cuenta con 68 años y en aquel entonces tenía 12, Dylan le dio de beber y la drogó antes de abusar de ella en su apartamento, en 1965.
En la nueva denuncia presentada en la Gran Manzana, la querellante señala que el legendario músico utilizó su estatus para ganarse su confianza “como parte de un plan para asaltar y abusar sexualmente de ella”.
“Bob Dylan, en un periodo de seis semanas entre abril y mayo de 1965, se hizo amigo y estableció una conexión emocional con la denunciante”, agrega el documento legal, presentado el pasado viernes por la supuesta víctima, según la documentación que se encuentra en el Tribunal Supremo de Manhattan, que identifica a la denunciante solo como J.C. y residente de la localidad de Greenwich (Connecticut).
Además, acusa a Dylan, de nombre real Robert Allen Zimmerman, de establecer esta conexión para que la supuesta víctima estuviera menos cohibida para “abusar sexualmente de ella” con la ayuda de “drogas, alcohol, y las amenazas de violencia física”, lo cual le causó daños emocionales y psicológicos que perduran “hasta la actualidad”.
El supuesto abuso por parte del responsable de “Blowin’ in the Wind” ocurrió en numerosas ocasiones, alega, algunas de ellas en el apartamento que tenía Dylan en el famoso Chelsea Hotel.
La denunciante afirma que las acciones del cantautor, de 81 años, le han llevado a sufrir depresión y ansiedad permanentes, que no le han permitido llevar a cabo actividades normales.
En concreto, lo acusa de asalto, agresión, detención ilegal y daños emocionales, algo que el representante de Dylan ha negado a la página web Page Six.
“Estas acusaciones de 56 años de antigüedad no son verdaderas y serán defendidas vehementemente”, argumentó el abogado Daniel Isaacs.
La demanda fue presentada el viernes pasado, un día antes de que llegara a su fin el periodo que se había abierto en Nueva York para presentar cargos de abusos sexuales infantiles que prescribieron bajo una ley aprobada en el estado en febrero de 2019.
Con información de Proceso.