Con el inicio del 2024 y en plena cuesta de enero, llega nuevamente el Blue Monday, reconocido por muchos como “el día más triste del año”. No solo por ser un lunes (que también), sino debido a la convergencia de variables propias de esta época, generando un día especialmente melancólico y depresivo. Pero, ¿cuál es la razón y el origen de esta afirmación?
Esta tradición de origen inglés se remonta a 2005, cuando el profesor de psicología Cliff Arnall de la Universidad de Cardiff diseñó una fórmula matemática para determinar qué día nos afectaba más emocionalmente. Los factores incluidos para situar el día más triste del año, el tercer lunes de enero, abarcan desde el mal tiempo y las deudas navideñas hasta el tiempo transcurrido desde las festividades y la falta de motivación.
El término ‘Blue Monday’ está vinculado a la psicología del color en la cultura anglosajona, donde ‘blue’ se utiliza para hablar de la tristeza. Sin embargo, la falta de rigor científico en esta fórmula ha llevado a la comunidad científica a desacreditarla.
Blue Monday: ¿Mito o Realidad? A pesar de su popularidad, muchos profesionales de la salud mental cuestionan su base científica y critican la trivialización de una enfermedad seria como la depresión.
José Ramón Pagés, Coordinador Nacional de la Asociación Nacional de Ayuda al Enfermo de Depresión (Fundación ANAED), ha expresado que aunque hay un agravamiento de las depresiones en primavera y otoño, la idea de un día miserable es ridícula y carece de base científica.
María Fernández, coach personal y autora, destaca que, aunque podamos sentirnos decaídos este lunes por factores propios de enero, no debemos tomarlo literalmente. Además, subraya que superar la tristeza y cuidar el bienestar emocional depende de nosotros.
Incluso el propio Arnall ha desacreditado su teoría del ‘Blue Monday’, al admitir que no es “particularmente útil” establecer un día en el que todos debamos sentirnos miserables, calificándolo casi como una profecía que se autorrealiza.
La Fórmula del Blue Monday
La fórmula es la siguiente: [W + (D-d)] x TQ / M X NA
La fórmula del Blue Monday consta de varios elementos: la W, que evalúa el clima; la D, que representa las deudas acumuladas durante las festividades; la d, que alude a la nómina de finales de enero; la T, que mide el tiempo transcurrido desde la Navidad; la Q, que indica el periodo desde el intento infructuoso de cumplir los propósitos de año nuevo. Todos estos factores se dividen entre M, que refiere a las motivaciones que aún persisten, y la NA, que simboliza la necesidad de actuar para cambiar aspectos negativos que rodean nuestras vidas. Este es el marco conceptual del Blue Monday.
