Con una trayectoria de más de 23 años, Ruby Gardenia se ha posicionado como uno de los íconos de la lucha libre profesional en México, representando al grupo de los llamados “exóticos”, que son aquellos que con sus personajes representan o son parte de la comunidad LGBTI.

Pero Ruby Gardenia, que como persona real se asume como homosexual, no solamente lleva su personaje arriba de un ring para complacer en un show que igual disfrutan chicos y grandes, para ella ser parte de la comunidad y luchador exótico le representa una responsabilidad social.

Por eso, arriba y abajo del ring, Ruby Gardenia se ha dedicado a luchar por visibilizar a la comunidad LGBTI y a procurar que sus derechos sean respetados, porque tanto arriba como abajo del ring, los señalamientos, la discriminación y la homofobia persisten.

Tijuana, la ciudad de las oportunidades

Detrás del maquillaje de Ruby Gardenia, existe Fernando Covarrubias, quien decidió identificarse así cuando no lleva puesto su alter ego. En entrevista, compartió que en un determinado momento de su vida decidió mudarse a Tijuana, porque representa a ‘la ciudad de las oportunidades’.

Fernando quería crecer como persona, desde niño le gustaba la lucha libre, pero antes de enrolarse en el mundo del pancracio, tuvo que sortear una etapa oscura porque desde los 18 años comenzó a trabajar de noche como trasvesti, lo cual no le gustó por la crudeza que se vive en ello.

FOTO: Manuel Ayala / Glocal Media.

“Ves la realidad tan cruda como lo es el mundo de las drogas, el sexo, de lo que vienes huyendo que es la discriminación. El ser señalado, sometido, ultrajado y decido dejarlo después de tres años y a los 23 fui a una función de lucha libre en el auditorio de Tijuana y me enamoré cuando vi bajar a El Santo, Blue Demon, Blue Panther y decidí que ahí es donde quería estar”, dijo.

Ahí fue cuando comenzó a entrenar en la escuela de lucha libre de Miguel Ángel López, mejor conocido como Rey Misterio (tío de Rey Mysterio Jr, figura de la WWE), a quien considera como un padre adoptivo.

En esos entrenamientos fue donde encontró la disciplina personal y deportiva y los deseos de superación que le han llevado durante 23 años como luchador profesional con el nombre de Ruby Gardenia, dentro del grupo de los llamados “exóticos”.

Luchadores gays, los que abrieron las puertas

Fernando comparte que una de las decisiones importantes en ese camino fue definir a ese personaje, para lo cual lo fue perfilando de acuerdo a su personalidad.

“Me dije, tú eres homosexual, para ti un personaje de los exóticos es ideal, porque en ese momento los gays exóticos estaban abriendo estas oportunidades y se estaba generando una visión más de aceptación gracias a la AAA (una de las empresas mexicanas de la lucha libre más importantes)”.

FOTO: Manuel Ayala / Glocal Media..

Anteriormente los luchadores considerados “exóticos” eran hombres heterosexuales interpretando un personaje “más delicado”, dice Fernando, pero a partir de luchadores como Rudy Reyna y May Flowers, además de Bello Adán y Pimpinella en Tijuana, quienes eran abiertamente homosexuales, “se abrió la pauta para que nosotros entráramos y le metiéramos lo vistoso”.

“Hubo una época en que era todo muy receloso, porque no permitían en televisión lo vistoso de nuestros personajes, no permitían lo amanerado de los personajes y gracias a ellas cambió, ahora me toca a mí hacer, por los que vienen atrás, que sigan teniendo estas puertas abiertas para que se desenvuelvan y no exista más represión, ni homofobia en los luchadores exóticos”, dijo.

Ruby Gardenia como fuente de empoderamiento

Fernando es Licenciado en Pedagogía e intérprete de lengua de señas mexicanas y no solamente lucha en el ring por ello, también en las aulas donde comparte la docencia y de manera personal. Ello le ha llevado a entender la parte psicológica del ser y el pensar de una persona que tiene una orientación sexual diferente.

“Fernando es una persona muy seria, pero con los años me fui empoderando y esa fuerza me la fue dando Ruby Gardenia, a quien le tengo un respeto y admiración porque Ruby me dijo ‘y me solté el cabello’ y eso me da un empoderamiento y no me da miedo salir y decir este soy yo, el que está detrás de ese maquillaje que también me permite enfrentarme al público”, detalla.

Fernando comparte que cuando se transforma en Ruby Gardenia sabe que nadie le puede hacer daño porque sabe lo que vale y lo que es, lo cual representa arriba del ring ante sus adversarios, y porque sin maquillaje se ha tenido que enfrentar a una serie de abusos emanados desde la autoridad, la policía y en el ámbito laboral fuera de la lucha libre.

Lucha por el respeto y la visibilización

Él tiene bien infundado que como deportista y figura publica influye ante las autoridades, por ello tiene claro que su labor y su responsabilidad social como deportista es “luchar por la visibilización, luchar por que se haga lo más correcto ante una sociedad que es hipócrita; al final del día mi compromiso ante la comunidad en general es hacernos visibles con respeto y que somos personas como cualquier otra”.

Para Fernando le resulta curioso saber en ese sentido que la lucha libre es “para cabrones” y no sabe en qué momento aguantaba las golpizas porque él venía de un mundo de machismo, de golpes, y meterse al mundo de la lucha libre significaba lo mismo, cosa con la que tuvo que lidiar y le ayudó para forjar un carácter, cosa que ahora transmite a las nuevas generaciones.

“Lo comparto con ellos porque aún es triste la situación de discriminación que vivimos, vivimos en un mundo de hipocresía porque por un lado las autoridades y las personas nos dicen que sí existimos, que sí nos permiten ciertas cosas, pero a final de cuentas, cuando no hay cámaras o nadie hace visible lo que sucede, no pasa eso, no hay respeto y sigue la discriminación”, apunta.

La transformación

Cuando Fernando se transforma en Ruby Gardenia, es ella entonces quien toma la voz, como lo hizo en esta entrevista, entonces Ruby comparte que “cuando estamos en el proceso de transformación, se deja atrás a la familia, los problemas y las preocupaciones, porque nos debemos al público, al arte y la cultura de la lucha libre, al espectáculo y a lo que la gente quiere ver”.

Destaca que durante la transformación también perciben “lo maravilloso que es la lucha libre”, pues piensan en la oportunidad que tienen como luchadores y el poder disfrutar con su personaje lo que es el mundo, “porque el mundo nos lleva a conocer”.

“Soy una afortunada de que la lucha libre me haya dado lo que de niño la vida a Fernando no le dio; me he ido de gira mucho tiempo, me quedo en hoteles de cinco estrellas, tengo el mar a unos pasos, he comido lo que no me había imaginado.

“Llegó un momento que viajé mucho por Latinoamérica, a Estados Unidos lo conozco como la palma de mi mano, hice gira por Europa con El Hijo del Santo y demás, dando la cara siempre por Tijuana en cualquier lugar y ganándome el respeto, por eso pido respeto también para nosotros”.

“Cuando Ruby sube al ring lo hace para darlo todo, pero, antes, se encomienda a Dios porque no sabe si va a regresar a casa o porque tal vez regrese con una lesión. O tal vez me muera, pero moriría haciendo lo que más me gusta que es la lucha libre, y eso es maravilloso”.

Arriba del cuadrilátero, Ruby no solamente lucha con el personaje o el alter ego de la persona que será su rival, ella también lucha en contra de la homofobia, contra la discriminación, entonces el ring también “se convierte en una sociedad que señala, que lastima y que es hipócrita, que no está siendo consciente de lo maravilloso que es la vida”.

Heredar un legado

FOTO: Manuel Ayala / Glocal Media..

Para Ruby más de 23 años en esa lucha ya “ha sido demasiado y he hecho mucho”, por eso ahora busca a alguien “que aguante los madrazos y tome ello como bandera”, para darle su nombre y heredarle su trayectoria y legado, sabe que será difícil que alguien la supla, pero no pierde la esperanza en ello.

Mientras tanto, ella comparte que, si alguien la hereda o no, ella quiere que la gente la recuerde como la que le gusta luchar, “porque vine de ceros y me voy con un 100, pero ese 100 se logró a base de mucho esfuerzo y mucho trabajo”.

“La lucha libre me dio una responsabilidad social como los superhéroes, entre más poderes tengas así es tu responsabilidad con la humanidad y Ruby Gardenia tiene súper poderes, mi poder es ese, el lograr la visibilidad de una orientación sexual que es tan igual a llamarse heterosexual”.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí