El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que está pensando “darle otra vuelta a la tuerca”, en referencia al presupuesto burocrático federal, con el argumento de que hace falta destinar más dinero al pueblo y pasar de la austeridad republicana a una fase superior que podría llamarse “pobreza franciscana”.
Respecto del caso del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que invalidó el recorte al presupuesto de este año del Instituto Nacional Electoral (INE), dijo que es un asunto que le compete resolver a la Cámara de diputados.
En la conferencia mañanera expuso que esa austeridad sería “para todos; que se acaben por completo los lujos, no puede haber gobierno rico con pueblo pobre, se malacostumbraron, se les olvidó que somos servidores públicos. ¿Para qué se meten al servicio público si lo que quieren es hacer dinero o tener de más?”, reprochó a los consejeros del INE y agregó:
“Que participen en el sector privado o que se apliquen en negocios particulares pero el servicio público es otra cosa; imagínense, un funcionario bajando de un carro último modelo en una colonia popular o que en un alto se para y va un camión urbano, saturado, lleno, con la gente parada y él es servidor público. ¿Qué no da pena? ¿Qué no se puede ser austero? ¿Qué no el poder es humildad?”, cuestionó el presidente Obrador.
Por ello, criticó a los consejeros del INE, argumentando que “andan con esas ínfulas” de superioridad y fantochería; comiendo en restaurantes caros, tomando vinos de importación y quieren vivir “muy por encima” de como subsiste el grueso de la sociedad.
Con información de Proceso.