El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a un tuit en el que el conductor de televisión Pedro Sola aseguraba que el país está “sumido en el caos”.
En su conferencia matutina, el mandatario mencionó la publicación del conductor del programa de espectáculos Ventaneando de Tv Azteca, cuyo dueño es Ricardo Salinas Pliego, y le contestó que si no le gusta su gobierno, puede votar el 10 de abril en la consulta para la revocación de mandato.
En el tuit que ya fue borrado, el economista convertido en presentador de chismes de la farándula escribió: “Nací en 1947, tengo 75 años cumplidos y jamás, jamás recuerdo haber percibido que nuestro país está sumido en el caos. Yo ya voy de salida pero y los que apenas van entrando? (sic) Triste realidad y tal parece que sin solución”.
Durante la mañanera, al ser cuestionado sobre la repercusión que tendría la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de proponerle al Instituto Nacional Electoral (INE) no pedir más recursos para la consulta, pero sí podría instalar menos casillas, López Obrador negó conocer dicha resolución.
Sin embargo, defendió la consulta porque, dijo, conviene que el ciudadano califique al gobierno, ya que es una forma legítima de dirimir sus diferencias.
En ese momento, aprovechó para contestarle a Pedro Sola:
“Ayer estaba yo viendo un mensaje de un comunicador diciendo que nunca había visto una situación tan crítica en México, que era un caos todo. Entonces, si es así como él lo señala, pues va a haber la posibilidad de que se tenga un gobierno que no propicie caos y que pongan orden en el caos, y esa oportunidad se va a tener con la consulta, porque se le va a decir: ‘¿Quién es el responsable en el caos?’ Aceptando sin conceder, dirían los abogados: el presidente”, señaló.
En ese sentido, dijo que el conductor tiene la oportunidad de manifestar su desacuerdo, como muchos otros millones que opinen igual que él.
“A votar y para afuera el presidente”, sentenció, aunque aclaró que, si hay personas que opinan lo contrario al comunicador de 75 años cumplidos, “pues entonces van a votar para decir que siga el presidente”.
Preguntó: “¿Quién manda en la democracia?” y se respondió: “El pueblo”.
Pese a lo anterior, comentó que hay algo que le llama la atención de sus opositores, y es que dicen que todo está mal, pero no quieren que se realice la consulta de revocación de mandato.
“Lo que me llama la atención es que dicen que está todo mal, pero que no quieren la consulta, que para qué se hace. No, si está mal, pues hay que corregir. Si yo no soy un ambicioso vulgar, yo no voy a encapricharme y, aunque no me quieran, como ya fui electo democráticamente, me tengo que quedar hasta el final, lo quieran o no lo quieran. No, no, no.
“Si yo no tengo apoyo del pueblo no puedo seguir gobernando, no se puede gobernar sin el respaldo del pueblo. Un gobernante que no tiene el apoyo del pueblo es como una hoja seca. Se requiere de autoridad moral para poder tener autoridad política. No es asunto legaloide de decir: Es que me eligieron por un periodo y termino hasta finales de septiembre y les guste o no les guste me tienen que aguantar. Eso es inmoral.
“Entonces, ojalá y establezcamos este método democrático, la revocación del mandato, para que nadie se sienta absoluto”, remató.
López Obrador dijo que respeta mucho las opiniones de todos, incluso de sus adversarios.
“Lo que sostengo es de que se están llevando a cabo cambios que no les gustan a algunos; pues cómo les van a gustar estos cambios si estaban acostumbrados los de mero arriba, los machuchones, a no pagar impuestos y tenían engañada a la gente”, recordó.
Preguntó si no se acuerdan cómo hablaban de que había que cobrarles más impuestos o había que cobrarle impuestos a los de economía informal, a los ambulantes, a los que se buscan la vida en la calle, porque la economía formal no crece, no funciona y la gente tiene que buscarse la vida.
“Y estos cínicos, corruptos, elaboraron un discurso donde se decía que se iba a resolver el problema fiscal de México si se le cobraba impuestos a los de la economía informal. Claro que hay que buscar que todos los paguemos, pero ¿qué pasaba o qué sucedía? Que los de arriba, los que promovían este discurso, no pagaban impuestos. Unos reverendos hipócritas.
“Pero no crean que no pagaban 20 mil pesos, 30 mil, 50 mil, 100 mil pesos de impuestos de un pequeño comerciante, de una pequeña empresa. No. Pagaban 10, 15, 20 mil pesos. Les condonaban los impuestos a las grandes empresas”, agregó.
Recordó que en la campaña presidencial le decía a la gente que pensara en una empresa grande o en un banco y en el que estuvieran pensando no pagaba impuestos y cuando llegaron al gobierno recibieron la información y descubrieron que así era. “¿Cuánto tiempo engañaron con eso? Entonces, están molestos”, señaló.
Otro punto que les molesta a sus adversarios es la ayuda a los pobres, porque ellos creen que son sus peones, que los trabajadores son flojos y se normalizó la concepción de que “si eres pobre es porque no trabajas”.
“Ahí está el ejemplo de nuestros paisanos migrantes. Cómo, donde hay oportunidades, salen adelante. Miren lo que están haciendo, nos están mandando, el año pasado 52 mil millones de dólares. Si el pueblo de México fuese un pueblo flojo, indolente, no saldría adelante en ninguna parte”, destacó.
Respecto a las becas entregadas a los jóvenes, comentó que ve en las redes sociales que los muchachos lo usan para comprar drogas o que están beneficiando a los “ninis” que ni estudian ni trabajan”, término que el exrector José Narro, de filiación priista, retomó y difundió como un chiste, “cuando nunca se hacía nada por los jóvenes”, aclaró.
Destacó que se molestan hasta por lo que se hace en materia de salud pública, pese a que faltan médicos, especialistas por culpa del modelo neoliberal; pero cuando dicen que aumentarán las becas de 8 mil a 20 mil especialistas en el país, una asociación médica le envió una carta manifestando su desacuerdo.
“Por eso hay estas inconformidades. Hay gente que está en desacuerdo con lo que estamos haciendo, nosotros los respetamos y afortunadamente tenemos la posibilidad de resolver estas diferencias de manera pacífica, ordenada, legal, con la consulta. Que todos participemos a favor o en contra”, invitó.
Confió en que los conservadores, “los que se creen fifís porque tampoco son tan especiales”, llamen a votar en la consulta para la revocación del mandato.
Con información de Proceso.