El Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis Primada de México planea abrirle un proceso a su sacerdote Juan Huerta, debido a que, hace 19 años, cuando ejercía su ministerio sacerdotal en Venezuela, abusó sexualmente del entonces menor de edad José Leandro Araujo, oriundo de Mérida, Venezuela.
El pasado lunes, en una conferencia de prensa realizada en la Ciudad de México, Araujo señaló que lleva años pidiendo justicia ante distintas instancias eclesiásticas, a fin de que se castigue al sacerdote pederasta, y es hasta ahora que el tribual de la arquidiócesis de México le “abrió un resquicio” para juzgar finalmente al sacerdote del que fue víctima.
Araujo indicó que los abusos ocurrieron en 2002, cuando él tenía 13 años y quería ser religioso, por lo que entró en la congregación religiosa Sociedad de San Pablo, en su natal Mérida, donde entonces estaba Huerta, quien pertenece a esa misma congregación, conocida como los hermanos paulinos.
Con el aval de sus padres, quienes confiaban en la honorabilidad de Huerta, Araujo comenzó a ir a la casa de Huerta, donde muy pronto, cada sábado, en su habitación, el sacerdote –que entonces tenía 46 años– empezó a abusar del niño.
Araujo agregó que, debido a estos abusos, no solo abandonó sus intentos de dedicarse al sacerdocio, sino que tuvo intentos de suicidio y requirió de ayuda psiquiátrica.
Y fue hasta 2018, cuenta, cuando decidió en Venezuela iniciar procesos legales y religiosos contra el sacerdote, por abuso sexual.
Lo denunció incluso ante el superior general de los paulinos en Roma, Valdir José de Castro, así como ante la nunciatura apostólica en Venezuela. Pero no hicieron nada y el religioso quedó impune.
Al año siguiente, en 2019, el pederasta fue enviado a la arquidiócesis primada de la Ciudad de México, donde actualmente vive en la casa provincial de los hermanos paulinos.
Por este motivo, Araujo comentó en la conferencia de prensa que también planea demandar a esta congregación religiosa, por encubrimiento.
Indica que, por lo pronto, la nunciatura apostólica en México ya le informó que se le abrirá un juicio a Huerta en el Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis de México, juicio que quedaría a cargo del vicario judicial José Romero Rodríguez.
Esto ya representa “un resquicio” para que finalmente se haga justicia, dijo la víctima. Y concluyó señalando que el sacerdote Huerta es “un delincuente y tiene que ser tratado como un delincuente”.
Con información de Proceso.