Una velocista bielorrusa dijo que fue llevada el domingo al aeropuerto en contra de su voluntad para abordar un vuelo de regreso a casa, después de que se quejara de los entrenadores nacionales en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Krystsina Tsimanouskaya, que debía competir el lunes en los 200 metros, dijo a Reuters que había buscado la protección de la policía japonesa en el aeropuerto de Haneda de Tokio para no tener que embarcar en el vuelo.
“No volveré a Bielorrusia”, dijo a Reuters en un mensaje a través de Telegram.
El Comité Olímpico de Bielorrusia dijo en un comunicado que los entrenadores habían decidido retirar a Tsimanouskaya de los Juegos por consejo médico por su “estado emocional y psicológico”. No respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios adicionales.
Un fotógrafo de Reuters vio a la atleta junto a la policía japonesa. “Creo que estoy a salvo”, dijo Tsimanouskaya.
Un oficial de policía del aeropuerto de Haneda dijo que estaban con una atleta olímpica de Bielorrusia en la Terminal 3.
Una fuente de la Fundación de Solidaridad Deportiva de Bielorrusia, que apoya a los atletas encarcelados o marginados por sus opiniones políticas, informó que Tsimanouskaya planeaba pedir asilo en Alemania o Austria el lunes.
Tsimanouskaya, de 24 años, dijo que personal del equipo de su país había acudido a su habitación el domingo y le había dicho que hiciera las maletas. La llevaron al aeropuerto antes de que pudiera correr en los 200 metros y en el relevo 4×400 metros el jueves.
Sostuvo que la habían retirado de la delegación “por el hecho de que hablé en Instagram sobre la negligencia de nuestros entrenadores”.
Tsimanouskaya se había quejado en Instagram de que la habían inscrito en el relevo de 4×400 metros después de que se descubriera que algunos miembros del equipo no podían competir en los Juegos porque no se habían sometido a una cantidad suficiente de pruebas de dopaje.
“El entrenador me añadió al relevo sin que yo lo supiera. Hablé de ello públicamente. El entrenador principal se acercó a mí y me dijo que había habido una orden de arriba para sacarme del equipo”, dijo Tsimanouskaya a Reuters desde el aeropuerto.