Lo que empezó como una discusión en el estadio de béisbol durante el juego de los Toros de Tijuana terminó a la salida con el asesinato de Carlos Alberto, un joven de 19 años tijuanense.
Eduardo Isaías, acompañante de Carlos Alberto informó a los oficiales que estaban en el estadio cuando sujetos le faltaron al respeto a la novia de su amigo provocando que se hicieran de palabras.
Al salir del estadio lo atacaron en la calle Misión de Santo Tomás, en el Cerro Colorado haciéndole varias detonaciones de arma de fuego hiriéndolo en la cabeza, cuello y en las dos rodillas que le causaron la muerte. El crimen ocurrió entre las 12 y la 1 AM.
Tras el atentado los presuntos responsables huyeron a bordo de un vehículo Taurus gris con rumbo a la Vía Rápida poniente.