Ninguna ballena es una isla es una obra que actualmente se exhibe en la Athenaeum Art Center, en San Diego, de la fotógrafa y artista tijuanense Angélica Escoto, quien radica en Baja California, desde donde ha desarrollado un diario visual autobiográfico.

Glocal Media conversó con la fotógrafa y artista Angélica Escoto sobre su obra que se exhibe en la Athenaeum Art Center. Su trabajo consta de series fotográficas donde la ballena y el escenario natural bajacaliforniano son protagonistas.

“Las imágenes que invento usando mi cuerpo y apropiándome de él para hacer un compendio de criaturas en situaciones punzantes, absurdas, fantásticas y de humor.”

Se trata de una obra que consta de más de diez series fotográficas y cada una tiene un texto que, a decir de Angélica, habla de la evolución de la ballena que primero fue como un perro, después un imponente mamífero más grande que un dinosaurio y de su casi extinción en el siglo XIX porque su grasa era usada para alumbrar las calles de Europa.

A propósito de esta exposición, Glocal Media platicó con la artista de amplia trayectoria quien, entre otras cosas, cuenta sobre las maravillas naturales que muestra esta región bajacaliforniana.

FOTO: Angélica Escoto

Vemos que en la obra abarcas diversos lugares y paisajes, ¿qué lugares son?

Desarrollé los proyectos especificamente en la cintura de la península de Baja California, donde existe, por el lado del Pacífico, una isla de arena que cambia de forma y de tamaño en sólo 24 horas, y por el Golfo de California, un impresionante archipiélago que tiene una isla que es un volcán extinto y que, para escalarlo, tuve que atravesar en kayak y nadando el Canal de Ballenas.

FOTO: Angélica Escoto

¿Cuál es el concepto que muestras con ello?

Sí, el azar siempre está conmigo. Mi secreto es coleccionar pacientemente las imágenes que me encuentro en cada viaje, las imágenes que persigo al regresar, una y otra vez al mismo lugar, las imágenes que invento usando mi cuerpo y apropiándome de él para hacer un compendio de criaturas en situaciones punzantes, absurdas, fantásticas y de humor. No hay más. El bestiario tiene una salvaje entropía, un ruido interior que repite conceptos, formas, deseos, y miedos que surgen de otras posibles realidades, aunque al final, como toda clasificación, tal vez estaría marcada por el error, la ausencia y la otredad.

FOTO: Angélica Escoto

¿Por qué el nombre deNinguna ballena es una isla’? ¿A qué nos remite ello?

Viene del poema del escritor inglés Jonh Donne, que dice Ningún un hombre es una isla entera de  mismo ya que cada hombre es un pedazo del continente”, del que tomé el título cambiando la palabra hombre por ballena, para acentuar a las ballenas no en un sentido geográfico sino semántico: La Tierra, la vida, la esponja, la medusa, la isla, la mujer.

FOTO: Angélica Escoto

Presentar esta “catalogación” de las series no quiere decir que he cerrado el bestiario y cómo hacerlo si hoy ha surgido un gran acertijo y con ellas más imágenes por inventar, construir y buscar:

La península de Baja California, tiene una longitud de mil 247 kilómetros. Si la recorro hasta la mitad cuatro veces por año desde el 2002 y sumando tres años atrás que atravesamos completamente seis veces la casi isla, me pregunto con estos datos, ¿cuántos kilómetros hemos recorrido mi familia y yo durante esos 15 años?

FOTO: Angélica Escoto

Podría hacer esa suma ociosa para ver si el azar me lleva a tener alguna relación con los 16 mil kilómetros que recorre cada año de ida y vuelta la Ballena Gris, desde el Mar de Bering hasta la Laguna de Ojo de liebre, en Guerrero Negro. Si me faltan kilómetros, puedo sumar con ego de ballena la distancia que he nadado ininterrumpidamente durante diez años en alberca y cinco años menos en el mar, más o menos dos kilómetros por día cinco veces a la semana.

¿Qué significa para ti que tu obra esté expuesta en una galería dentro de un edificio tan icónico del Barrio Logan?

Es un orgullo, sobre todo porque yo trabajé en esa área documentando a las quinceañeras de mexicanos inmigrantes que residen en San Diego, California. En realidad, nunca me imaginé que mi obra de la península de Baja California se expusiera primero en San Diego y no en Tijuana, donde la propuse tantas veces y donde tengo mi casa.

FOTO: Angélica Escoto

¿Hasta cuándo se va a mantener expuesta tu obra y qué futuro le depara, la llevarás a algún otro espacio?

La obra se mantiene hasta la primera semana de septiembre y solo se abre la galería los martes y jueves de 10:00 am, a 5:00 pm. La voy a mover ahora a Xalapa, Veracruz, estamos esperando un contacto para confirmar la fecha.

FOTO: Angélica Escoto

¿Qué proyectos en paralelo estás trabajando ahora o tienes planeados para realizar?

Estoy trabajando varios. La pieza de un video que se llama “Cuando despertó, la ballena todavía estaba ahí”, es otra serie donde cambio la semiótica del dinosaurio en el pensamiento existencial por la semiótica de la ballena. Me apropio del cuento de Monterroso para el título de esta pieza: Cuando despertó, la ballena aún estaba allí o más increíble, “Cuando despertó, la ballena era una duna”.

FOTO: Angélica Escoto

He empezado a decirles a todos que estoy por escribir mi inmersión al vientre de una ballena, no es que quiera parecer exótica, ni profunda, sino que quiero experimentar con la imagen, las palabras y mis sentidos la inmersión a los órganos gigantes del cetáceo y por qué no ó por que sí. La única que no lo podría creer sería yo misma y yo misma me permito inventar que estoy dentro de una ballena.

FOTO: Angélica Escoto

El próximo 25 de agosto, Angélica Escoto dará una charla en la galería en la que se expone su obra, en la que compartirá sobre todo su proceso fotográfico y conocimientos en el tema de la ballena.

Angélica Escoto es artista multidisciplinaria, sus piezas autobiográficas, conceptuales, documentales y de archivo estructuran narrativas visuales que tienen que ver con el origen, la existencia y la identidad. Utiliza la literatura para atar la geología, biología, zoología, y astrofísica a la ontología del “objeto”, uno de sus proyectos más ambiciosos que habla de la basura como arte.

Estudió periodismo en la Ciudad de México en la escuela Carlos Septién García. Trabajó como editora en varios diarios regionales en la República Mexicana. Su trabajo fotográfico ha sido publicado en España, Francia, Alemania, Estados Unidos, Argentina, Venezuela y México. Ha exhibido sus piezas en Chile, España, Italia, Brasil, Colombia, Argentina, Costa Rica, Guatemala, Cuba, El Salvador, EU y México.

Su cuenta profesional de Instagram es @angelica_escoto_

FOTO: Angélica Escoto

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