Entre los muertos en el tiroteo masivo en un desfile del Día de la Independencia de Estados Unidos en el suburbio de Highland Park, en Chicago, se encuentran un abuelito de unos 70 años que viajó desde México a visitar a su familia y una profesora de una sinagoga.
Nicolás Toledo fue la primera víctima identificada a última hora del lunes por su familia después que un hombre armado en una azotea abriera fuego contra las personas en el desfile del lunes, matando a seis e hiriendo a más de 36.
“Mi abuelo Nicolás Toledo, padre de ocho hijos y abuelo de muchos, nos dejó esta mañana del 4 de julio, lo que se suponía que iba a ser un día familiar divertido se convirtió en una pesadilla horrible para todos nosotros”, dijo su nieta, Xochil Toledo.
“Nicolás no sólo era un hombre cariñoso, (era) creativo, aventurero y divertido. Como familia estamos rotos y entumecidos”, dijo.
La familia de Toledo creó una página en el servicio de micromecenazgo GoFundMe para recaudar dinero para enviar su cuerpo a su México natal. La página ha recaudado más de 33.000 dólares hasta el martes.
Toledo, de 70 años, había estado visitando a su familia durante el último mes. Pasó sus últimos días nadando y pescando y estando entre sus parientes, dijo su familia a los medios de comunicación.
Familiares de Toledo resultaron heridos en el tiroteo, pero se espera que sobrevivan, informó CBS Chicago.
Otra persona que murió en el tiroteo fue Jacki Sundheim, profesora de una sinagoga de Highland Park. La Congregación Israel de North Shore confirmó su muerte en un correo electrónico a los miembros.
Con información de Reuters.
