Después de más de una década de haber sido deportada a Tijuana y de haber construido junto con otras madres de familia la asociación Dreamer’s Mom’s, la señora Yolanda Varona finalmente ve una posibilidad de poder regresar a Estados Unidos y reintegrarse con con hijos.

En entrevista, la fundadora y directora del grupo de madres deportadas, compartió que actualmente está en una lista de personas que pudieran ser beneficiadas mediante un programa que instrumentó recientemente Joe Biden para veteranos deportados y sus familiares y solamente está a la espera de que las autoridades dé migración le den una resolución.

“Estoy muy nerviosa y muy contenta porque se abren puertas para mucha gente; esto significa volver a vivir, volver a respirar al cien por ciento, volver a sentir lo más hermoso de mi vida que es volver a abrazar a mi hija que no la he visto en toda esta década y nerviosa porque es regresar a reintegrarme a la vida de mis hijos que ahora son adultos”, dijo.

FOTO: Manuel Ayala / Glocal Media..

Agregó que en cuanto a las demás madres integrantes de la organización, hay cinco más que también están a la espera de una resolución, por quienes seguirá luchando para que también se puedan lograr sus casos y estén con sus familias, pues recordó que la mayoría de ellas tiene a sus hijos en suelo estadunidense.

“Estando dentro (en EEUU) creo que podría conseguir mucho más recurso para seguir apoyando a estas y muchas más madres, no pienso dejar el grupo ni mucho menos, el grupo seguirá adelante y esperamos que estas cinco mujeres puedan regresar con sus familias, sería maravilloso”, recalcó.

La señora Yolanda refirió que durante los 10 años que lleva dentro del activismo, con su organización han podido lograr que cinco mamás estén ya junto con sus familias y destacó que la labor que han hecho ha sido de manera desinteresada y siempre con recursos que reciben y generan de forma altruista por parte de la ciudadanía y organizaciones civiles.

REUTERS/Jose Luis Gonzalez

Resaltó que entre los logros que han obtenido también han sido casos en las que las mamás han podido recuperar a sus hijos mediante procesos judiciales en los que han apoyado con abogados, además de casos por entrevistas en televisión, entre otros.

La activista dijo que es incalculable saber actualmente cuantas madres han sido deportadas durante estos años, ya que tan solo a su organización “han llegado decenas y diría que son cientos, no solo en México, sino en todo el mundo, porque hemos recibido mujeres de Europa que vienen a Tijuana para estar más cerca de sus hijos”.

Finalmente dijo que vivir bajo esa situación en Tijuana es completamente difícil, pues ellas viven con el temor de que algo les pase, de perder la vida y que se queden aquí sin poder estar con sus hijos; “es un constante nerviosismo, yo trato de estar en casa porque ahora mis hijos son los que me dicen ‘no salgas, mamá, quédate en casa no te vaya a pasar algo’, entre eso y no estar con ellos es muy difícil”.

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