Cuatro hermanas están construyendo en las verdes colinas del centro de Bosnia la primera aldea de estilo hobbit del sureste de Europa, con la esperanza de atraer a los fans de los libros y películas de “El Señor de los Anillos”, además de para compartir sus recuerdos de infancia.
“A menudo hemos celebrado reuniones familiares en esta colina y hemos debatido cuál sería la mejor manera de aprovechar estas vistas con fines turísticos”, explica Milijana, la mayor de las hermanas Milicevic, señalando la impresionante vista de un valle y un lago enclavados entre las colinas.
El Hobbiton de Kresevo, como se llama la aldea hobbit del lugar, está situado en el pueblo de Rakova Noga (“Pata del cangrejo”), cerca de la antigua ciudad real y minera de Kresevo, a unos 40 minutos en coche de la capital, Sarajevo.
El año pasado, Marija, ingeniera geóloga de 28 años, propuso a sus hermanas Milijana, Vedrana y Valentina construir una casa al estilo de las viviendas de los hobbits de los libros del británico J.R.R. Tolkien. Las “casas agujero” de los hobbit se construyen en el suelo.
Las hermanas decidieron que sus casas debían incluir características de la zona donde viven y que cada una decoraría una vivienda a su gusto.
Ya han construido dos casas y otras tres están en construcción.
La primera casa, con una puerta y una ventana redondas de color verde, se llama Lipa, en honor del pueblo donde Milijana pasó la mayor parte de su infancia con sus abuelos. Lipa es también el nombre bosnio del tilo.
“Lipa es mi nostalgia, el recuerdo de una infancia sana en la que plantar un huerto era un juego social, los animales domésticos amigos y un barril de estaño el mar Adriático”, dice Milijana en su casa decorada en madera.
La segunda casa se llama Ober por una cueva de Kresevo. Su techo está decorado con estalactitas para dar la sensación de estar en la cueva.
“A lo largo de la historia, Ober ha sido la mina de la que los mineros de Kresevo extraían cinabrio y lo fundían para obtener oro”, explica Marija.
La puerta y la ventana de su casa están pintadas de rojo, como el mineral de cinabrio.
Las otras tres casas, que estarán terminadas en breve, también llevarán nombres de lugares de interés local.
Por ejemplo, Bedem, con torres en las esquinas, lleva el nombre de la fortaleza donde se alojó la última reina de Bosnia, Katarina, durante su estancia en Kresevo.
Según Marija, ya han empezado a llegar turistas de toda la región y de otros países europeos.
De Reuters.
