Tras un exhorto que hizo la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Puebla para que su homóloga nacional se abstuviera de atraer el caso del bebé que fue encontrado muerto en el basurero del penal de San Miguel, la CNDH dio a conocer que respetará la atribución del organismo estatal y ya no investigará al respecto.

El 15 de enero, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió un comunicado en el que dio a conocer que ejercería su facultad de atracción para investigar ese caso, sin embargo, este lunes la CEDH Puebla le pidió que se inhibiera de conocer esos hechos al indicar que son competencia local que ya había en curso una investigación iniciada por el organismo local.

“…la CDH Puebla realiza de manera más respetuosa un atento exhorto a la CNDH para que en el presente caso se inhiba y abstenga de conocer de hechos que carecen de su competencia al ser un asunto de naturaleza local, que actualmente se encuentra en trámite bajo el número de expediente 95/2022”, indicó el organismo local en un escrito.

En respuesta a esto, este miércoles, la CNDH emitió otro comunicado en el que aclara que no ha ejercido la facultad de atracción del caso, ni realiza investigación al respecto, además de asegurar que es respetuosa de las facultades y atribuciones de los organismos estatales de derechos humanos y de la labor que éstos realizan. Aunque reitera su llamado a esclarecer el caso y dar con los responsables.

“La CNDH reitera su llamado para que se realice una investigación integral y exhaustiva que permita el esclarecimiento de los hechos y dar con el o los responsables de la muerte del menor de edad”, puntualiza.

Este lunes, el gobernador Miguel Barbosa Huerta rechazó que haya ocultado este caso y que si no había hablado de la muerte del bebé es porque no le habían preguntado.

“Eso se va aclarar muy pronto y vamos a fincar responsabilidades contra todos, los que permitieron la entrada del bebé, en qué condiciones y antes, quienes son los papás, todo lo que pasó alrededor de este bebé inocente y que fue objeto de un abuso satánico de quienes lo rodearon”, expresó.

Periódico Central dio a conocer que la Fiscalía General de Puebla ya identificó al bebé que fue encontrado en un contenedor de basura del penal, pues aún traía la banda del hospital con los apellidos “Ayala Peralta” y que se presume había nacido en la Ciudad de México.

De acuerdo a esto, el menor de tres meses de edad había muerto desde el 5 de enero, pero fue encontrado el lunes 10. Sin embargo, en las fotos que se han divulgado en medios locales, no se aprecia un alto grado de descomposición. “…lo que creen que salió directo de una morgue”, señala ese medio.

Con información de Proceso.

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