Joe Biden, presidente de Estados Unidos, entregó al Congreso federal de su país una propuesta de presupuesto por 6.8 billones de dólares para el año fiscal en curso, bajo el cual asegura que en la próxima década se logrará reducir el déficit de la nación en 3 billones de dólares.
El proyecto de ley de Biden para financiar al gobierno federal contiene un proyecto de aumento de impuestos estimado en 5 billones de dólares en los próximos 10 años a los estadunidenses y empresas que ganan millones de dólares al año.
El punto central del presupuesto de Biden es la reducción del déficit y el aumento de impuestos a los ricos y a las grandes corporaciones, con lo que va en contra de los principios de los legisladores republicanos que dominan la Cámara de Representantes, por lo que se vaticina su rechazo.
El mandatario propone aumentar de 21% a 28% el pago tributario federal de las grandes empresas del sector energético y de las grandes corporaciones, recaudación con la que sostiene que se podrán financiar pensiones y asistencia médica a jubilados y estadunidenses pobres.
La tajada más grande del proyecto presupuestal de 6.8 billones de dólares se le asigna al Departamento de Defensa.
Biden solicita al Capitolio 8 mil 350 millones de dólares para financiar los gastos del Pentágono, tanto en programas nacionales como para el desarrollo y modernización de equipo de defensa, y para continuar apoyando a naciones extranjeras como Ucrania ante la agresión rusa.
Se trata del presupuesto más alto en la historia de la nación para gastos militares, lo que es visto como una estrategia de Biden para satisfacer a los republicanos a cambio de que permitan el aumento de impuestos.
A los estadunidenses más ricos, Biden propone establecerles un impuesto federal mínimo de 25%, idea que contrasta con los republicanos de la Cámara de Representantes y del Senado, quienes ya adelantaron que respaldarán la propuesta del presidente.
“Con el aumento en los impuestos, que es justo, para las grandes corporaciones, las empresas energéticas y a los estadunidenses ricos, se podrán además eliminar gastos innecesarios del gobierno”, dijo Shalanda Young, la directora de asuntos presupuestales de la Casa Blanca.
En otra de las vertientes del presupuesto de Biden avocada a los impuestos, se propone incrementar de 1% a 4% el impuesto que se paga por la compra de acciones en el mercado financiero nacional e internacional en Wall Street, Nueva York.
Para los estadunidenses con menores ingresos, Biden propone un crédito tributario de 2 mil dólares por cada menor de edad en las familias, de 3 mil dólares por cada niña o niño mayor de 6 años, o de 3 mil 600 dólares si son menores de 6 años.
Con el objetivo de financiar o subsidiar los costos de energía de familias pobres, Biden pide un presupuesto de 4 mil 100 millones de dólares, que se sumarían a los 13 mil millones ya aprobados por el Capitolio.
Respecto al tema de seguridad en la frontera con México, el presidente de Estados Unidos solicita 25 mil millones de dólares, 350 millones de dólares para contratar a otros 350 agentes de la Patrulla Fronteriza y 40 millones para contrarrestar el tráfico de fentanilo.
De Reuters.